Real Madrid

Real Madrid

Nacho, te toca

Los entrenadores no utilizan al principio al canterano, que lleva en el Real Madrid desde alevines, pero después siempre le necesitan para partidos importantes, como el de Málaga de hoy.

Benzema toca el balón durante el entrenamiento del equipo, hoy en Valdebebas.
Benzema toca el balón durante el entrenamiento del equipo, hoy en Valdebebas.larazon

Los entrenadores no utilizan al principio al canterano, que lleva en el Real Madrid desde alevines, pero después siempre le necesitan para partidos importantes, como el de Málaga de hoy.

Nacho no jugó ni un minuto en los cinco primeros partidos de Liga con Rafa Benítez en el banquillo. Nacho jugó 4 minutos en los primeros cinco partidos de Liga de Zidane. El año pasado, con Ancelotti, en las primeras cinco jornadas de Liga, disputó 23 minutos. Es un clásico lo que le sucede todas las temporadas en el Real Madrid. De primeras, los entrenadores no cuentan con él. En los primeros encuentros se fían de los veteranos, de los que suman más minutos; los técnicos necesitan seguridad y pocos experimentos, porque quieren empezar con buen pie, pero después, según va pasando la temporada, llegan las lesiones, las rotaciones o el cansancio y entonces empiezan a mirar al banquillo como la tabla de salvación cuando ya no les queda nada más. Son días como el de hoy en Málaga. Esas tardes en las que los entrenadores le dicen a Nacho: «Te toca». Y ahí está él, un canterano que entró en el Madrid de alevín y que sigue sumando temporadas y minutos en el primer equipo, sin hacer mucho ruido y sintiéndose necesario. Aunque sólo de vez en cuando.

A Ancelotti le sucedió durante el invierno pasado, cuando el equipo se le caía, entre fatigado y lesionado, y Nacho fue una de sus soluciones de urgencia. A Benítez le pasó durante todo el mes de octubre, en los encuentros en Vigo o en Sevilla. Se había quedado sin defensas y Nacho fue su opción para remediar los huecos en la parte de atrás. Y Zidane, ahora, se encuentra con el mismo problema. Pepe sigue lesionado. «Anímicamente está bien. Lo que tiene Pepe lleva su tiempo. Está mucho mejor y ahora su sensación es buena. La idea es que estos días siga con lo que tiene que hacer. El martes volverá con nosotros», dijo ayer el técnico. A Varane las dos tarjetas amarillas tan discutidas que vio contra el Athletic le impiden jugar hoy. Y Zidane, como han hecho todos sus predecesores, le pide a Nacho que, pese a no contar mucho con él antes, hoy en Málaga, una salida más que peligrosa, se deje la vida. «De los cuatro centrales que hay, todos son del mismo nivel. Nacho está preparado para jugar, compite muy bien. Estoy tranquilo», aseguró el entrenador madridista.

En Roma, Zidane agradeció a todos los jugadores su apoyo, sobre todo a los que menos están jugando. Quiere tenerlos contentos, enganchados para que en días como hoy no le fallen. Nacho ha jugado la mitad de sus partidos en el primer equipo blanco de central y la otra mitad la reparte entre la banda izquierda y la banda derecha. «Tiene cualidades para jugar en todas las posiciones de la defensa. Nacho es muy bueno», contaba de él Ancelotti. «Es un profesional», afirman en el Madrid, donde se valora tanto su actitud como lo que hace cuando juega. Quiere más minutos, pero no se aleja ni deja de estar preparado si no los tiene. No se ha lesionado nunca. Esta temporada, marcó un extraño gol contra el PSG, jugando de lateral izquierdo, pero es de central donde se siente más a gusto. O sea, donde va a jugar hoy. «Tengo que pelear con tres de los mejores centrales del mundo», ha reconocido. Este curso ha participado en 16 encuentros entre todas las competiciones, para sumar 1.113 minutos, por los 1.444 de Pepe, los 1.471 de Ramos y los 1.899 de Varane. Es una pelea que pierde casi siempre, porque los titulares son los otros y él, el que tiene que reemplazarlos. Por eso no puede lesionarse nunca. «Siempre viene en los días libres», aseguran en el club blanco. Nacho sabe que el entrenamiento, cuidarse y tener suerte es lo único que le puede mantener en forma para cuando le llamen.

Dicen que tuvo ofertas de Italia, pero le cuesta moverse. Su hermano Álex se marchó de la cantera blanca en busca de oportunidades, pero no tuvo fortuna. Nacho es de Madrid, donde ha vivido toda su vida, donde en marzo nació su hija Alejandra y donde estudia INEF, para pensar en lo que puede llegar después. Durante toda esta semana ha ido viendo que le iba a tocar jugar tras un comienzo de 2016 amargo, viendo los partidos en el banquillo. Tiene paciencia porque sabe que siempre le llega su turno. Como hoy.