Ciudad del Vaticano

Cara a cara: ¿Ha vuelto el mejor Messi?

Cara a cara: ¿Ha vuelto el mejor Messi?
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El diez asusta; por Quim Doménech

Ya está aquí. El mejor futbolista del planeta ha vuelto. Lo estamos comprobando todos. Y tú también, Alfredo, mal que te pese. Argentina sigue sin estar a un nivel óptimo, pero gracias al talento y a los goles de Leo, ya ha superado la fase de grupos del campeonato ganándolo todo. Messi ha puesto su talento a disposición del equipo, se siente líder del grupo, confiado. Además, ha llegado en forma al Mundial. Hace dos días celebró sus 27 años de la mejor manera posible, arropado por su familia, por los suyos, por la gente que más quiere. Sabella le dejó celebrarlo cenando con ellos y a cambio, seleccionador y jugador, pactaron que sólo jugase 70 minutos contra Nigeria para cerrar la primera fase. Le bastaron para marcar dos goles y ser una vez más decisivo para la albiceleste.

Ganas de reivindicarse

Entiendo que te moleste ver a Messi saliéndose en este Mundial, que busques excusas para desacreditarle por el simple hecho de ser del Barcelona, pero no cuela. Cuatro goles, Pichichi del torneo, el genio asusta. Ha resurgido tras un año difícil y llega muy picado, con ganas de reivindicarse, de ganar el título que le falta para consagrarse definitivamente. Para que ni siquiera tú puedas cuestionarle nunca más como el mejor jugador de todos los tiempos.

La sensación del torneo con Neymar

No será fácil teniendo en cuenta el nivel de sus compañeros, pero Messi está decidido a hacer historia y viendo su respuesta en lo que va de competición, todo es posible. Ya ha superado la presión inicial, con lo que ha hecho hasta ahora ha demostrado a un país entero que él sí cumple, que da la cara. Junto a Neymar está siendo la sensación del torneo y lo será aún más el próximo martes. Mientras tanto, tu admirado Ronaldo puede irse hoy por la puerta de atrás sin pena ni gloria y sin haber superado la primera fase. Ánimo, Alfredo.

No delires, no ha jugado contra nadie; por Alfredo Duro

Te lo voy a dejar clarito desde el minuto uno. Tengo amigos en el Club Recreativo Guindalera que si mañana se enfrentaran a la Argentina de Messi no dudes que tendrían firmado un cheque en blanco para cambiar su trabajo en uno de los mercados más auténticos y chulones de Madrid por cualquier equipo con ganas de prestigio. Lo tendrían a huevo por la sencilla razón de que hubieran hecho de ese acontecimiento una auténtica declaración de «atributos». Justo lo que no se ha visto en ninguna de las pachanguitas que a Messi y sus amigos les han montado en este Mundial a la carta. Y eso que al grupo de Argentina sólo le ha faltado la potente Ciudad del Vaticano. Otra cosa habría sido con mi admirado Guindalera y mi Villaverde Boetticher. ¡Con éstos me habría gustado ver a Messi y Cía!

Nunca será Maradona

Cuatro goles sin especial mérito ante «potentísimas» selecciones que, entre todas, ¿sabes los partidos que han ganado en los mundiales? Siete. Cinco de ellos la misma Nigeria que ayer decidió ser conformista y perder por la mínima en lugar de disputarle a Argentina el liderato del grupo. Por mucho que se te caiga la baba con tu admirado Messi, la única realidad es que su presencia en el campo no sirve para disipar un montón de dudas sobre esta Argentina a la que tú admiras, aunque no quieras admitir que Messi no será nunca Maradona.

Ni fútbol ni grandeza

Me estás hablando de tres victorias por la mínima. Sin fútbol y ninguna grandeza. Para venderme al Messi que no se ha visto en ningún Mundial vas a tener que armarte de paciencia. Hasta que la autopista de florecitas que Blatter, ese presidente de la FIFA que un buen día se bebió Oxford entero para ponerse en ridículo y confesar su incontrolable «messianismo», les ha colocado les enfrente con equipos de verdad. Ya sabes, Quim: Alemania, Holanda, Francia, Villaverde, Guindalera... Equipos de verdad. Ahí te quiero ver.