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El calendario es blanco

Euforia madridista tras el gol de Pepe en Anoeta
Euforia madridista tras el gol de Pepe en Anoetalarazon

El Real Madrid parte desde el tercer lugar de la parrilla de salida de la recta final por la Liga y es el único de los candidatos que no depende de sí mismo, pero a cambio tiene un calendario más amable en las últimas seis jornadas. Los de Ancelotti necesitan ganar todo y esperar un par de tropezones de Atlético y Barcelona, que tienen el «gol average» ganado a los blancos en caso de empate a puntos. Superada con nota la visita a Anoeta, en teoría el test más complicado de aquí al final, al tercer clasificado sólo le quedan dos encuentros más lejos del Bernabéu, donde disputará los otros cuatro choques en busca de meter presión a los de arriba.

Al Atlético le quedan cuatro compromisos en campo contrario y tres al Barça, otro pequeño motivo para el optimismo blanco, que se une a que rojiblancos y azulgranas tienen pendiente un enfrentamiento entre ambos. Uno de los dos no podrá hacer pleno en las seis jornadas que restan y fallará, sí o sí, el último día, algo que podría facilitar que las cuentas madridistas salieran justo en la línea de meta.

«Esto se va a resolver en el último partido», avisaba Ancelotti cuando el Madrid estaba solo en la cabeza de la tabla y, ahora, que está por detrás, mantiene el discurso y no piensa en tirar este torneo: «Lucharemos hasta el final», insistía, mientras Xabi Alonso asegura convencido que pueden darse todavía «muchas sorpresas». En el vestuario son conscientes de que con la derrota en Sevilla se fueron muchas de las opciones, pero todavía están vivos y quieren seguir en la pelea y evitar que sus rivales tengan la oportunidad de relajarse.

Mirando la posición actual de los rivales que esperan en el camino a los tres grandes, el Real Madrid también puede ver una ligera ventaja en el esprint definitivo. Los de Ancelotti sólo se van a encontrar con dos conjuntos que están entre los diez primeros (Valencia y Espanyol), y del resto, dos (Almería y Valladolid) están ahora mismo en puestos de descenso a la Liga Adelante. Sus rivales tendrán hasta tres enemigos de la primera mitad de la clasificación y ninguno que a estas alturas esté en las posiciones de peligro para descender. La más que convincente actuación en San Sebastián, ha devuelto al Real Madrid la fe en la Liga, algo dañada tras las dos derrotas seguidas en el clásico y ante el Sevilla. Desde aquella noche negra en el Sánchez Pizjuán, los madridistas han vuelto de manera contundente al buen camino, solventando con goleada sus tres compromisos posteriores y dejando encarriladas las semifinales de la Liga de Campeones.

El equipo hizo terapia con una manita al Rayo en un día complicado, en el que el público recriminó hasta el egoísmo de Cristiano. Tres días después, con la llegada de la música de la «Champions», la afición recuperó la ilusión y el equipo, el ritmo y la tensión que le llevó a encarrilar 31 partidos sin derrota. Una primera media hora casi perfecta dejó tocado al Dortmund, que no pudo marcar en un Santiago Bernabéu más que feliz. Ayer, el Madrid mantuvo el tono con una segunda parte que destruyó a la Real Sociedad, incapaz de dar respuesta.

El saldo es de 12 goles a favor y ninguno en contra desde las dos derrotas seguidas, números muy parecidos a los que presentaba el equipo después de visitar el Camp Nou y que le permitieron remontar hasta seis puntos de desventaja y ponerse al mando con +3 respecto al Atlético y +4 con el Barcelona. Ahora vuelve a estar por detrás, pero cree en el calendario y en su tradicional espíritu luchador –«este equipo nunca se rinde» dijo el canterano Nacho el sábado– para ganar la Liga.

La Liga más «barata» de las últimas tres

«Si hay que hacer 100 puntos para ser campeones, los haremos», dijo Ancelotti hace un tiempo, aunque finalmente, y por primera vez en tres temporadas, no hará falta llegar tan lejos para levantar el trofeo. En 2012, el Madrid de Mourinho fue campeón llegando al centenar y pulverizando el récord de goles, mientras que en 2013 fue el Barça de Vilanova el que conquistó por primera vez la cima de los 100 puntos. Este curso nadie puede subir tan alto, ya que si el Atlético gana todo «sólo» alcanzaría los 97. Hagan o no pleno los de Simeone, será la Liga más «barata» de las últimas tres, aunque carísima si se compara con cualquiera antes de 2010. Hasta ese año, en el que el Barça hizo 99 puntos, bastaban poco más de 80 para ser el mejor, pero ahora casi no se puede fallar para tener opciones. «En Italia, un empate era bueno; aquí es una tragedia», dijo Mourinho cuando luchaba por derrotar al mejor Barça de la historia.