Cargando...

Fórmula 1

F1: Las razones del arranque para olvidar de Carlos Sainz en Williams

El piloto madrileño está mostrando una irregularidad que no es habitual en él y su compañero Albon está claramente por delante ahora mismo

Carlos Sainz, durante el GP de la Emilia Romagna AFP7 vía Europa PressEUROPA PRESS

Después de siete carreras disputadas de la temporada 2025 de la Fórmula 1, se puede decir que el comienzo de Carlos Sainz en su nueva escudería, Williams, no ha sido el mejor. Las cosas en este deporte no son fáciles, además, el madrileño ha tenido varios episodios de mala suerte que han podido ayudar a que la situación no sea la buscada a estas alturas del año. La diferencia de puntos con su compañero es de 40-11 a favor de Alex Albon y eso, en una estructura media como es Williams, es una diferencia inquietante.

Sobre todo, porque el español llegó al mítico equipo inglés con la vitola de piloto completo, rápido, fiable, hombre de grupo y con grandes capacitaciones para desarrollar el coche. Y puede que lo haya hecho, sin embargo, el que más lo ha aprovechado ha sido Albon, que ha logrado grandes resultados, ha pescado en río revuelto en varias carreras y casi de un plumazo, ha borrado cualquier intento de convertirle en el segundo piloto de la escudería.

Ni mucho menos. Ambos pilotos comparten algo de historia, ya que los dos proceden de la cantera de Red Bull y también ambos, de alguna manera, fueron repudiados por la compañía energética, aunque de forma diferente. El tailandés sufrió el escarnio habitual de quienes rodean como segundo piloto a Verstappen, y Sainz, por su parte, jugó mejor la partida y antes de que las cosas se precipitaran decidió romper el vínculo contractual y marcharse a Renault, cosa que hizo con dos carreras por disputar antes de terminar la temporada 2017. Luego vinieron McLaren y Ferrari, y en su caso, los dos equipos mejoraron mucho, aunque en esto de la F1 el mérito no se pueda personalizar ni individualizar.

Ni Sainz ni su entorno esperaban un comienzo así. Hay que conocer bien el coche, la forma de trabajar de la escudería y entender los procesos de puesta a punto en una escudería que está invirtiendo mucho dinero para mejorar y bien que lo están haciendo, pero no con sus dos pilotos.

En el pasado Gran Premio de Emilia Romagna el madrileño acató órdenes de su equipo, tanto para su estrategia como para facilitar la vida a su compañero Albon, que iba con un planteamiento que a final de carrera resultó más acertado. Acabó quinto justo por detrás de Hamilton. En cualquier caso, Sainz se mostraba optimista con su rendimiento en lo que va de año: «Estoy contento con el nivel que estoy ofreciendo en Williams en mi sexta carrera. Estoy yendo muy rápido, he ido rápido tanto en calificación como en carrera, cuando puedo mostrar ritmo lo demuestro, lo que pasa es que los puntos se reparten el domingo. Llevamos ya varios domingos en los que las cosas se nos tuercen, y hay que aprender por qué, averiguar por qué y mejorar ahí para que no se escapen los puntos», finalizó.

Además, ahora Sainz ha tenido que lidiar con la posible incompatibilidad que supondría que su padre inicie su candidatura a la presidencia de la Federación Internacional del Automóvil, FIA, cuya campaña arranca en las próximas semanas (si es que no lo ha hecho ya…). De hecho, algunos pilotos de la parrilla de salida fueron cuestionados por este tema y, de momento, nadie ha expresado disconformidad… aunque en la selva que es la F1 si Sainz padre llegara a la presidencia de la FIA y su hijo siguiera siendo piloto las cosas cambiarían para muchos.

Los resultados de Sainz han sido: Australia: 18.º (abandono por error de conducción del que se argumentó un problema con el acelerador), China: 10.º (1 punto), Japón: 14.º (sin puntos), Bahréin: 19.º (sin puntos), Arabia Saudí: 8.º (4 puntos), Miami: 9.º (2 puntos) y Emilia-Romagna: 8.º (4 puntos). Una irregularidad que no es habitual en el piloto madrileño, que en todos los equipos en los que ha militado, salvo los comienzos en McLaren, siempre ha tenido una línea ascendente.