F-1

Japón

Un portavoz del circuito achaca a la «mala suerte» el accidente de Bianchi

«Los comisarios levantaron dobles banderas amarillas, por lo que los pilotos tenían que desacelarar, pero el coche de Bianchi sufrió “aquaplaning”», apunta Masamichi Miyazaki.

El grave accidente sufrido por el piloto francés Jules Bianchi (Marussia) el pasado domingo en el Gran Premio de Japón pudo ser más una cuestión de “mala suerte” que de una posible mala decisión de no detener la carrera por las condiciones de la pista del circuito de Suzuka, indicaron miembros del trazado japonés este martes.

“Los comisarios levantaron dobles banderas amarillas tras el accidente de Sutil, lo que quiere decir que los pilotos tenían que decelerar para que pudieran inmediatamente parar, pero desafortunadamente el coche de Bianchi sufrió ‘aquaplaning’ en ese momento y se deslizó hacia el lugar del accidente, lo que fue mala suerte”, apuntó Masamichi Miyazaki, portavoz del circuito de Suzuka.

Este aseguró que era “cierto que la lluvia estaba llegando y que la pista estaba mojada, pero no lo suficiente para parar la carrera”. “Creo que los comisarios de carrera hicieron el mismo juicio”, añadió al respecto.

El Marussia de Jules Bianchi impactó a más de 200 kilómetros por hora contra la grúa que estaba retirando el monoplaza de Adrian Sutil (Sauber), accidentado vueltas atrás, sufriendo graves heridas en la cabeza.

Un portavoz de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) explicó el lunes que el francés, operado de urgencia el domingo, se mantiene “crítico pero estable”.