Fútbol

El infierno en el partido de Querétaro: “Le picaron la cabeza con un picahielos”

Los hinchas cuentan lo que sufrieron en el Querétaro-Atlas, de la Liga mexicano, que acabó en un acto de violencia desatada. Se suspendió la jornada de la Liga

Aficionados del Club Atlas, encienden velas en la madrugada de este domingo, en las inmediaciones del estadio Jalisco, en la ciudad de Guadalajara en Jalisco (México), debido a los actos de violencia ocurridos en el partido ante Querétar
Aficionados del Club Atlas, encienden velas en la madrugada de este domingo, en las inmediaciones del estadio Jalisco, en la ciudad de Guadalajara en Jalisco (México), debido a los actos de violencia ocurridos en el partido ante QuerétarFabricio AtilanoAgencia EFE

La mexicana suspendió todos los partidos programados para el domingo después de una pelea masiva entre aficionados durante el partido entre el anfitrión Querétaro y el Atlas de Guadalajara, el actual campeón de la liga. “Lamentamos y condenamos estos hechos, que van en contra del espíritu de nuestro fútbol”, dijo la Federación Mexicana de Fútbol en un comunicado.

El partido del sábado se suspendió en el minuto 62 cuando se produjeron múltiples peleas en las gradas. El personal de seguridad abrió las puertas del campo para que los aficionados, entre ellos mujeres y niños, pudieran escapar de las gradas. El gobernador de Querétaro, Mauricio Kuri, dijo en vídeos publicados a primera hora del domingo que 14 hombres habían sido hospitalizados. Cuatro de ellos tenían heridas leves y ocho estaban en condición estable, pero dos de los heridos estaban en condición crítica con lesiones graves. Luego subieron a 24 los heridos y la narración de los hechos de los aficionados agredidos hablan de muertos:

“De nuestra van todos salimos bien, pero golpeados. (Veníamos) con amigos sí pero no venían en nuestra van, incluso uno cercano falleció. Prefiero no decir su nombre. Ya se contactaron con ellos (con los familiares del amigo fallecido)”, recogía el periódico Récord. Lo que se vivió fue el infierno: “Sí, sí, vi muchos (fallecidos). Hubo bastantes, ya estaban los cuerpos inertes, ya inertes los siguieron golpeando, incluso a uno le picaron la cabeza con un picahielos ya que había fallecido para después quitarle toda su ropa”. Según los aficionados del Atlas, todo pudo estar preparado: “Probablemente ya estaban todos puestos de acuerdo ya que era una revisión bastante estricta para nosotros, ya que no podíamos pasar monedas, llaves, cartera, cadenas, ningún anillo pero ellos tenía picahielos, uno traía pistolas, no sé de dónde sacaron la pistola, traían piedras, navajas, entonces sí está raro eso y aparte hay videos donde se ve que los policías abren las rejas”.

Los jugadores del Atlas visitante huyeron rápidamente a los vestuarios, al igual que algunos del lado del Querétaro. Otros jugadores del Querétaro, incluido el portero uruguayo Washington Aguerre, se quedaron cerca del banquillo tratando de calmar a los aficionados.

Tras varios minutos, algunas de las peleas se trasladaron al campo, donde continuaron los puñetazos y las patadas. Algunos iban armados con sillas y barras de metal.

“El día más oscuro para el fútbol mexicano”, titulaba en portada el diario mexicano El Universal el domingo.

Guadalajara es la capital del estado de Jalisco, y el Atlas también ha tenido problemas recientemente con la violencia entre sus aficionados. El año pasado, en el “clásico” con el rival de la ciudad, las Chivas, hubo una pelea en las gradas.

Desgraciadamente, lo que está pasando en Querétaro... está pasando en mi país”, dijo Rafael Márquez, ex capitán de la selección mexicana que comenzó su carrera en el Atlas y también fue su entrenador.