Polémica
Dos jugadores del Barcelona se empujaron en una discusión en un entrenamiento, tuvieron que separarlos
Hansi Flick, entrenador azulgrana empieza a tener problemas para llevar la plantilla esta temporada. El ambiente está enrarecido
El arranque de la temporada para el Barcelona está dejando claro que no todo es tan fluido como en el curso pasado. Hansi Flick, se ha topado con un escenario complejo que va mucho más allá de lo estrictamente futbolístico. Desde los eternos problemas con el Camp Nou, cuyas obras parecen no ajustarse nunca a los plazos previstos, hasta las fricciones en el vestuario, el alemán ya ha tenido que lidiar con más de un frente abierto. La imagen de un club cohesionado y en calma empieza a resquebrajarse.
Tras el último partido de LaLiga, el propio Flick dejó entrever su preocupación al hablar de un “asunto de egos” que, según sus palabras, estaba rompiendo la buena sintonía dentro del grupo. No entró en detalles ni dio nombres, lo cual alimentó aún más las especulaciones. Sin embargo, con el paso de los días han ido saliendo a la luz episodios que apuntan directamente a una relación que hasta hace poco parecía intocable: la amistad entre Gavi y Fermín. Ambos, formados en La Masia y con un vínculo que venía de la cantera, han mostrado recientemente tensiones que han sorprendido a todo el vestuario.
Una patada de Gavi en un entrenamiento
El periodista Javi Miguel, en el espacio “Barça Reservado”, desveló dos episodios significativos que retratan la situación. El primero tuvo lugar en la gira asiática, concretamente en Corea, durante la pretemporada. En uno de los entrenamientos, Gavi realizó una entrada muy dura sobre Fermín. Más allá de la intensidad habitual en una práctica, la acción se interpretó como desproporcionada, hasta el punto de que algunos compañeros reaccionaron con sorpresa e incluso con cierta incomodidad. El riesgo de una lesión era evidente, y ese tipo de gestos, en un contexto de preparación, no suelen ser bien recibidos.
La segunda escena de tensión se dio ya en Barcelona, semanas después. De nuevo en un entrenamiento, la tensión volvió a saltar entre los dos jóvenes futbolistas. En este caso, la acción desembocó en un empujón de Gavi hacia Fermín. La reacción de Fermín no se hizo esperar: respondió con firmeza, y ambos entraron en una discusión subida de tono. La situación escaló lo suficiente como para que varios compañeros tuvieran que intervenir. Entre ellos destacaron capitanes como Raphinha y Araujo, que asumieron el rol de mediadores y buscaron rebajar la tensión. Finalmente, y a modo de escenificación de una tregua, Gavi y Fermín se fundieron en un abrazo, dando a entender que el asunto quedaba cerrado. Sin embargo, quienes presenciaron la escena saben que ese gesto no disipa del todo el trasfondo de la situación.
Un ambiente enrarecido
Estos incidentes reflejan un cambio de clima interno que preocupa tanto a la plantilla como al cuerpo técnico. No se trata únicamente de un roce entre dos jugadores jóvenes, sino del síntoma de un vestuario donde empiezan a aparecer fisuras. Para Flick, que quería dar continuidad a la competitividad mostrada en la temporada anterior, este tipo de tensiones suponen un reto inesperado. El entrenador necesita un grupo unido y enfocado, especialmente en un momento donde el entorno institucional tampoco ayuda.
El caso del Camp Nou es un buen ejemplo. El estadio, en pleno proceso de remodelación, se ha convertido en un problema constante para el club. Las obras avanzan con retraso y el horizonte de regreso se desplaza una y otra vez. Esa incertidumbre afecta no solo a la imagen del Barcelona, sino también a la logística del equipo, que debe adaptarse a jugar donde puede, como en el Johan Cruyff contra el Valencia.