LaLiga Santander
El Madrid se queda sin tiempo
Fue mejor en la segunda mitad, cuando hubo fútbol. Ganó el Barça más precavido. El árbitro, decisivo
Un Barça diferente y no reconocible, basado en las acciones a la contra, se impuso al Real Madrid (2-1) y abre hueco en la Liga, después de un partido planteado por el 'Tata' Martino desde otra perspectiva a la habitual
Cuando el Real Madrid despertó, tenía un gol en contra y sólo le quedaban cuarenta minutos para remontar. No tuvo tiempo y perdió en el Camp Nou, pero se marcha de allí confirmando que puede jugar bien al fútbol y que con un poco más de suerte y dos decisiones (u omisiones) arbitrales, el resultado podría haber sido distinto. Acabó el clásico sin botín material y a seis puntos del Barcelona, pero en la segunda mitad aclaró su futuro. Jugó bien y durante muchos minutos fue mejor. Controló al equipo de Martino y descubrió su cara más austera, la más asustada: Song sustituyó a Iniesta para controlar un choque que dominaba en el marcador. Este Barça no se parece al equipo de años anteriores.
La segunda parte del Madrid no fue suficiente, porque el larguero, un par de intervenciones de Valdés y un penalti no pitado de Mascherano a Ronaldo (además de una polémica mano de Adriano) le detuvieron. Entonces Illarra ya ponía orden en el centro del campo, Modric se desataba y Khedira llegaba al área. Justo el lugar donde se le nubla el horizonte. Pero es indudable el empuje que da al equipo.
Fue el fútbol tras el descanso el que salvó el primer clásico de la temporada, porque los primeros cuarenta y cinco minutos dibujaron a dos equipos que tienen más dudas que certezas, que prefirieron el control al entusiasmo. Quien más sorprendió fue Ancelotti, que cambió el triángulo del centro del campo, con el que había disputado los dos últimos partidos y optó por Sergio Ramos en vez de Illarra. Al Madrid le faltó ambición y fútbol. Y se fue con un gol en contra. En el ataque, el técnico italiano hizo lo que se preveía: dio la titularidad a Bale, pero en vez de colocarlo en la banda, le situó de delantero centro, para no cambiar ni a Cristiano Ronaldo ni a Di María.
Es difícil valorar si esos tres atacantes pueden combinar bien, porque no hubo partido en la primera parte. Si el Madrid fue precavido, el Barcelona no arriesgó más: vivió de las genialidades de Iniesta, uno de los jugadores de los que más se había dudado en los primeros encuentros de esta temporada. Fue él quien cambió el sino del partido, quien iluminó la primera mitad cuando tras un pase filtrado de Busquets llegó al área con Sergio Ramos en el cogote. La jugada la termina con sutileza Neymar. El Barcelona se conformó con el gol. O no le dio para más.
Si Ancelotti había avisado que era un partido para futbolistas hechos y no engañó después en la alineación, Martino, sin decirlo, también lo vio claro: Tello y, principalmente, Bartra, fueron los descartes del entrenador argentino. En un duelo importante, los jóvenes dan un paso atrás. El Barcelona está lejos de lo que quiere ser, si es que tiene claro lo que quiere ser. Aún así, tiene al Madrid a seis puntos, que sin ser decisivo, le da cierto aire para seguir buscando. Martino atendió a las jerarquías. Cesc fue delantero y Messi se pegó a una banda, hasta desaparecer. La estrella argentina está en un momento de su carrera que parece que ha decidido no correr más de lo necesario. Se queda descolgado, a veces, metros detrás de la defensa rival y no participa en el juego. Un partido triste el de Messi, que sólo tuvo protagonismo al final, cuando su equipo le sacaba en corto los córners para perder tiempo y no rifar el balón. Quizá fue uno de sus peores clásicos, intrascendente. De Messi tuvo que hacer Alexis. Saltó al campo para ganar el partido cuando peor estaba su equipo y más creían los blancos en poder empatar. Alexis no paró quieto, dio movilidad al ataque y fue superior a los cansados centrales madridistas. El Madrid se volcaba al ataque y el chileno fue más listo que Varane. Le ganó la carrera y su vaselina a Diego López decidió un clásico de sólo media parte.
Al equipo de Ancelotti se le había escapado el partido antes, cuando Benzema enseñó su rabia en un tiro que se rebotó con violencia en el larguero. Fueron los mejores minutos del duelo, por fin sin miedos, con el Madrid, más natural y el Barcelona respondiendo a ráfagas, en las que echaba al rival contra su portero. Cuando por fin hubo pasión, cuando el clásico tuvo el tono que se esperaba días antes, el conjunto blanco fue superior al rival.
Cristiano Ronaldo corrió la banda izquierda y llegó con continuidad al área y Jesé (mientras Morata lo veía desde la grada) revolucionaba el ataque. Ellos marcaron el tanto del Real Madrid demasiado tarde para los méritos durante esos minutos y demasiado tarde para ganar el partido. Se escapó el clásico. Aclaró sus ideas.
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Iniesta recupera su varita
En las horas previas a cualquier clásico las quinielas sobre las alineaciones se multiplican y surgen teorías de todo tipo sobre lo que deberían hacer los entrenadores. En el Barcelona, la línea que generaba más dudas era el centro del campo, donde Cesc e Iniesta parecían jugarse un puesto junto a Xavi y Busquets. Pero Martino decidió cambiar su idea habitual y apostar por los tres «pequeños» juntos por primera vez. «Don Andrés» hizo buena esta apuesta.
Lejos de su mejor forma, Iniesta recuperó su varita en el momento oportuno para el Barça y ofreció un recital digno de su mejor versión. Se enganchó el balón en las botas antes de cederlo a Neymar para que anotara el primero. Una conexión que se repitió en la segunda parte, esta vez con un pase largo milimétrico, pero que Diego López desbarató. Martino decidió sacarle del campo antes de tiempo y el Camp Nou le brindó una ovación. Si Iniesta juega a este nivel, no volverá a entrar en una quiniela nunca más.
- Ficha técnica
2 - Barcelona: Víctor Valdés; Alves, Piqué, Mascherano, Adriano; Busquets, Xavi, Iniesta (Song, m.77), Cesc (Alexis, m.70), Messi y Neymar (Pedro, m.84).
1 - Real Madrid: Diego López; Carvajal, Pepe, Varane, Marcelo; Khedira, Sergio Ramos (Illaramendi. m.56), Modric; Di Maria (Jesé, m.76), Cristiano Ronaldo y Bale (Benzema, m.61).
Goles: 1-0, m.19: Neymar. 2-0, m.78: Alexis. 2-1, m.90+1: Jesé.
Árbitro: Undiano Mallenco (col. navarro). Mostró cartulina amarilla a Busquets (m.7), Sergio Ramos (m.14), Adriano (m.35), Bale (m.45), Khedira (m.59), Marcelo (m.64), Cristiano Ronaldo (m.80)
Incidencias: Asistieron al encuentro 98.761 espectadores, en partido correspondiente a la décima jornada de la Liga BBVA disputado en el Camp Nou. En el palco estaban presentes entre otros, el presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas; y el alcalde de Barcelona, Xavier Trias.
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