Real Madrid

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El mejor Keylor, para empezar

Zidane aún no ha rotado en la zona defensiva, donde destaca la forma del guardameta

Keylor Navas, en el entrenamiento del Real Madrid, ayer en Valdebebas
Keylor Navas, en el entrenamiento del Real Madrid, ayer en Valdebebaslarazon

Los futbolistas de élite son peculiares. A los 30 años ya han vivido casi todo lo importante o lo más llamativo de su vida profesional y por tanto se les pueden escribir biografías o rodar películas acerca de su vida, como la que se está haciendo de Keylor Navas.

Los futbolistas de élite son peculiares. A los 30 años ya han vivido casi todo lo importante o lo más llamativo de su vida profesional y por tanto se les pueden escribir biografías o rodar películas acerca de su vida, como la que se está haciendo de Keylor Navas. «Hombre de fe» ha terminado de rodarse en Costa Rica y en las últimas semanas el equipo ha estado trabajando en España: en Albacete, en Valencia y en Madrid, las tres ciudades en las que ha vivido el guardameta. Si en su país han reproducido su infancia y han utilizado, por ejemplo, el viejo coche con el que le llevaban a entrenar, en España buscan los paisajes de su madurez, de su vida profesional y está claro que el Bernabéu es uno de ellos.

El problema de películas así es que la vida del protagonista aún está en marcha y hay que decidir cuándo se pone fin y que se mete en la hora y media que dura el filme. ¿El «The end» es cuando ficha por el Madrid?, ¿o mejor cuando gana la primera Champions, la misma temporada en la que está a punto de irse?, ¿o no le daría más emoción y se acerca más al título de la película meter la segunda Copa de Europa después de una campaña más que irregular?

Porque si la cinta no llega a esa parte faltaría un episodio fundamental de la fe de Keylor en sí mismo y que tanto se puso a prueba durante la primera mitad del curso. Navas no pudo hacer la pretemporada y después le costó mucho ponerse en forma. Tanto que en los despachos, y también en la grada, se dudó acerca de su continuidad.

Sin embargo, ahí sigue. Ayer, según recogieron las cámaras de Cuatro, en uno de los rondos de entrenamiento, Zidane, que participaba en él, comete un error y entre risas, Keylor le dice: «Espabila». El guardameta lo hizo, eso de espabilar, la temporada pasada; lo hizo además en el momento más importante, a la hora de los títulos y por eso Zidane ha defendido su permanencia. El técnico y toda la plantilla, con Sergio Ramos a la cabeza, que se fían de Keylor como nunca. Hoy, contra el Deportivo, va a disputar su encuentro 101 como portero madridista; y en 35 de ellos no ha recibido un gol. Con gran capacidad de reacción y muy ágil, ha despejado las dudas.

Porque Zidane ha cambiado el equipo por delante, pero no lo ha tocado por detrás, donde en los tres encuentros oficiales han jugado los cuatro defensas y Keylor Navas. Las rotaciones, por ahora, no afectan lo mismo a todas las zonas. «Todos queremos hacerlo bien y en el equipo siempre va a haber cambios. Aquí no hay un plan A y un plan B», decía ayer el técnico francés.

Durante el curso pasado, hubo un momento en el que el entrenador aseguró que las rotaciones se iban a dar también en la portería y Kiko Casilla tuvo minutos, sobre todo al principio, cuando Navas no pudo jugar por lesión. Es probable que este año también le busque un hueco, sobre todo en los primeros partidos de Copa, pero no parece que se vaya a abrir el debate que sí hubo en los últimos meses de 2016, respecto a que portero debía jugar, debido a que la vuelta de Keylor no fue lo más afortunada.

Pero eso está más que olvidado por el Madrid, el público y el portero. La fe ha podido con todo.