Champions League

Guirassy, la gran amenaza para el Barcelona y la demostración de que los delanteros también se hacen

Guirassy, 10 goles en la Champions con el Borussia Dortmund, empezó jugando como defensa

Dortmund's Serhou Guirassy, left, duels for the ball with Barcelona's Inigo Martinez, right, during the Champions League quarterfinals first leg soccer match between Barcelona and Borussia Dortmund, at the Lluis Companys Olympic stadium in Barcelona, Spain, Wednesday, April 9, 2025. (AP Photo/Joan Monfort)
Guirassy, en el partido de ida de cuartos entre el Barcelona y el Borussia DortmundASSOCIATED PRESSAgencia AP

Muchos delanteros aseguran que el gol se tiene o no se tiene, que es como un don, un instinto, con el que se nace, pero Serhou Guirassy desmiente esa teoría. «No nací goleador, me he convertido en uno», dice en «France Football» el delantero del Borussia Dortmund, la gran amenaza para el Barcelona esta noche.

No conforme con eso, acaba también con otro de los pensamientos tradicionales en el fútbol: cuando los niños son buenos, suelen jugar de delanteros en sus equipos y conforme evolucionan y los físicos se van igualando, muchos van retrasando su posición para encontrar su sitio. Su caso fue al revés. «No siempre he sido delantero. Al principio, jugaba de central, luego mediocampista», explica el futbolista nacido en Francia, pero que juega para el país de sus padres, Guinea.

La explosión goleadora de Guirassy

Guirassy ha convertido diez goles en esta Champions, los mismos que Harry Kane. Sólo está por detrás de los 11 de Lewandowski y los 13 de Raphinha. Se ha movido toda su carrera entre las ligas francesa y alemana. El curso pasado en el Stuttgart pegó el subidón, al lograr 30 tantos en 30 partidos (13 era lo máximo que había conseguido en una misma temporada), lo que le llevó al Borussia, donde ha mantenido el nivel. «He tenido dos temporadas locas, pero no he cambiado nada. No trabajo más, no duermo más, no hago más análisis de vídeo. Es una cuestión de confianza. Y he comprendido que al máximo nivel, el talento no basta. Hay que superar la barrera del dolor en el esfuerzo, en realizar carreras de alta intensidad una y otra vez, con mayor rapidez y frecuencia que los rivales. Quizá ahí esté la clave», analiza el delantero.

La diferencia entre el Barcelona y el Dortmund en Montjuïc fue importante, pero el equipo alemán tuvo también sus opciones de marcar. No estuvo fino Guirassy en un par de oportunidades inmejorables, por lo que es raro que le vuelva a pasar. En el último partido en la Bundesliga, ante el Bayern, tampoco marcó, pero dejó una jugada impresionante con varios controles de espalda y una chilena que terminó en el gol de Anton que supuso el 2-2 final.

Es un delantero diferente desde sus comienzos hasta en su forma de pensar, pues el gol no es lo único que le llena. «Si marco, pero no juego bien, seré lo suficientemente honesto como para decirlo», admite. Eso sí, hay una cosa que le enamoró desde el principio: «El ruido de la portería al marcar. Es realmente bonito».