Monreal: «Me falta jugar una fase final»

El lateral del Arsenal reconoce que su espina clavada con la Selección es no haber sido elegido para ninguno de los últimos cuatro grandes campeonatos

Sólo tres jugadores (Piqué, Silva y Busquets) sobreviven en esta convocatoria del partido en el que debutó Nacho Monreal (Pamplona, 1986) con la Roja. Era agosto de 2009, contra Macedonia, y jugó 19 minutos en sustitución de Capdevila. Entre medias, España ha jugado dos Mundiales y dos Eurocopas, pero el lateral del Arsenal no ha conseguido llegar a ninguna fase final. Es la «espina» que le queda con la Selección.

–¿Ha cambiado mucho la Selección desde que debutó?

–Hay jugadores que lo van dejando, otros que van entrando. Hay un gran cambio a nivel de jugadores, pero a nivel de fútbol, de lo que los entrenadores proponen para la Selección, seguimos en la misma dinámica que estos años de atrás y que tantos éxitos nos ha dado.

–¿Se siente cómodo?

–Los equipos grandes proponen un fútbol de posesión de balón, de llegada, y se asemeja lo que propone el Arsenal a lo que propone la Selección. Me siento cómodo, cuando vienes aquí estás rodeado de los mejores jugadores de España y eso ayuda mucho. Cuando tienes el balón siempre tienes una solución, tienes un pase fácil que dar porque el compañero siempre está bien colocado. Y se la das a un compañero que la va a mantener, que nunca pierde la pelota.

–¿España está en condiciones de volver a optar por los títulos?

–Sí que estamos, por supuesto que estamos. Lógicamente ha habido un cambio de generación, una generación que lo ganó todo: Eurocopa-Mundial-Eurocopa. Muchos jugadores, los más importantes, los capitanes, jugadores con muchísimo peso, lo dejan y empiezan a venir chavales jóvenes con muchísima calidad, pero hace falta experiencia. No se ganó el último Mundial ni la última Eurocopa y es complicado, pero la generación que viene a día de hoy tiene un nivel tan bueno como el que hubo en su momento y tiene opciones de aspirar a todo, por supuesto.

–¿Es una ventaja que Lopetegui haya ganado ya con muchos de ellos en la sub-21?

–Eso es bueno. El seleccionador está tirando mucho de gente que conocía. Son jugadores que han seguido creciendo y ahora les da la oportunidad para la absoluta. Con Julen estamos muy contentos porque desde el primer momento ha sabido transmitirnos qué es lo que quiere para la Selección, cómo quiere jugar, es un entrenador que está muy pendiente de todo, hace unos entrenamientos muy trabajados y va a sacar el máximo rendimiento de todos.

–Con él ha probado en defensa de tres. ¿Le gusta?

–Es una posición que no he ejercitado en mi carrera en muchas ocasiones. Cuando me toca se me puede hacer un poco raro, pero al final juegas con grandísimos jugadores y te haces a ello. El primer partido jugando con línea de cinco fue contra Albania y salí contento de la actuación que tuve y de la que tuvimos en general. Estamos aquí para ayudar y si jugamos con tres atrás, encantado.

–¿Sienten todavía el respeto de los rivales?

–Sí, por supuesto. Siempre que hay una Eurocopa o un Mundial, España está entre las favoritas. Y eso nos lo hemos ganado por méritos propios. Ganar una Eurocopa, un Mundial y una Eurocopa seguidos no lo ha hecho nadie más en la historia. Somos únicos y la gente es consciente de que España tiene grandísimos jugadores y es un candidato a ganar todo siempre.

–¿Jugar una fase final de un gran campeonato con España es lo que le falta?

–Es la espinita que tengo clavada con la Selección. Estoy superorgulloso de todas las oportunidades que me han dado aquí, no me puedo quejar de nada, pero es cierto que me quedo con esa espinita de que siempre que ha habido una Eurocopa o un Mundial no he estado en la lista final. Nada que reprochar al míster en su momento, porque si no he estado es porque ha decidido que hay otros jugadores que lo merecen más que yo. Y ahora hay otra oportunidad, otra cita mundialista, y voy a pelear al máximo para demostrar a Julen que debe contar conmigo.

–¿Cómo es Arsene Wenger, su entrenador en el Arsenal?

–Es una persona bastante cercana, le gusta tener el vestuario muy controlado, que nada se salga de unos parámetros. Le gusta tener un vestuario sano, de gente buena. En el trato se preocupa de cómo está el jugador, de qué sensaciones tiene, es muy atento...

–¿Les afecta en el trabajo diario que el Arsenal lleve tanto tiempo sin ganar?

–Sí que te afecta, porque estamos hablando de un club histórico, de un club ganador, y llevar tantos años sin ganar títulos importantes como la Premier League te genera una presión extra, porque los aficionados están esperando «este año, este año, este año» y pasan las temporadas y no lo conseguimos. Por eso tienes más presión por conseguirlo. Desgraciadamente estamos viviendo también una situación en la que hay mucha gente que quiere al míster por todo lo que ha hecho en estos veinte años, pero hay una pequeña parte de la afición que se está manifestando en contra de él y de su posible renovación. Y esto es algo negativo para el club, es algo negativo para el equipo, porque llega un momento en que parece que estás más centrado en lo que va a hacer el míster y no en lo que debemos hacer los jugadores en el campo.

–Es inevitable con una persona que lleva veinte años en un sitio y es tan carismático...

–Al final en el fútbol se habla de todo y por el hecho de no haber ganado cosas importantes hay gente que está pidiendo un cambio. Pero la última palabra la tiene él, porque los dueños del club confían en él y va a ser quien decida si da el paso o no lo da.