Fútbol

Otro palo para Kylian Mbappé: un descalabro histórico

El delantero del Real Madrid no vive su mejor racha: fuera de la Champions se ha visto golpeado por el fracaso de su otro equipo

Kylian Mbappe of Real Madrid gestures during the UEFA Champions League 2024/25 Quarter Final Second Leg match between Real Madrid C.F. and Arsenal FC at Santiago Bernabeu stadium on April 16, 2025, in Madrid, Spain. AFP7 16/04/2025 ONLY FOR USE IN SPAIN
Kylian MbappéAFP7 vía Europa PressEuropa Press

Sin duda esta ha sido una semana negra para Kylian Mbappé. Fuera de la Champions, señalado por los aficionados del Real Madrid y con una lesión que lo mantiene como duda de cara a la final de la Copa del Rey.

Pero por si esto no fuera suficiente, desde Francia las noticias tampoco son buenas. El Caen, del que en Mbappé es propietario, pierde 3-0 en casa y volverá a jugar en la Tercera División francesa después de 42 años.

Un descalabro histórico

Comprado en julio del año pasado por un fondo de inversión vinculado al delantero Mbappé, el Caen perdió este viernes ante el FC Martigues por 3-0 en casa y descendió a la tercera división del campeonato francés, a falta de tres jornadas para el final. El Caen no jugaba en la Tercera División francesa desde 1983.

Esta fue la vigésima derrota del Caen en 31 partidos jugados en la Ligue 2, la segunda división del Campeonato francés. El equipo tiene la peor defensa de la competición, con diferencia, con 51 goles encajados. También fue el que menos ganó: sólo cinco victorias.

Coalition Capital, fondo de inversión gestionado por la familia de Kylian Mbappé, oficializó la compra del Caen en julio del año pasado. La empresa forma parte del conglomerado liderado por la madre de la estrella, Fayza Lamari, que ya gestiona carreras deportivas, una fundación benéfica y negocios de publicidad.

Según información del diario francés L'Équipe, la empresa de Mbappé invirtió cerca de 15 millones de euros y se convirtió en el accionista mayoritario del club. El descenso del Caen a la tercera división fue considerado un fracaso por la prensa europea, porque el equipo era considerado uno de los favoritos para ascender a la Ligue 1, la primera división.

La derrota ante más de 18.600 aficionados en el Stade Michel d'Ornano encendió los ánimos. La afición desplegó en el estadio una pancarta con la frase: "Dirección y jugadores: todos culpables, todos fuera".