Giro total

Lo que se esconde tras la no dimisión de Rubiales: ¿Qué le hizo cambiar de opinión?

Todo parecía sentenciado para el presidente de la RFEF, Luis Rubiales, pero -horas antes de la Asamblea Extraordinaria- el caso dio un giro de 360 grados

Luis Rubiales, en la Asamblea Extraordinaria de la RFEF
Luis Rubiales durante la Asamblea ExtraordinariaRFEF

Todo parecía indicar que a las 12:00 en punto Luis Rubiales comunicaría de manera oficial su dimisión ante la Asamblea Extraordinaria de la Federación Española de Fútbol.

Las denuncias se amontonan en la mesa del CSD y la petición de Jenni Hermoso a través su sindicato solicitando "medidas contundentes" unido a la apertura de expediente por parte de la FIFA parecían haber dado la puntilla definitiva al presidente de la RFEF y que hoy anunciaría la renuncia al cargo. Pero no ha sido así y en un giro inesperado no deja otra salida al Gobierno que tener que inhabilitarlo. Fuentes de la propia Federación confirmaban ayer a los medios que hoy Rubiales daría el paso definitivo que zanjaría una tormenta social y política sin precedentes. Pero para sorpresa de todos, incluidos los presidentes de la Federaciones territoriales, lo que finamente ha ocurrido no ha sido eso ni mucho menos.

Rubiales comenzaba su discurso pidiendo "disculpas sin paliativos" a la Casa Real por su intolerable gesto en el palco al agarrarse sus partes junto a la Reina Letizia y el resto de autoridades. Pero este fue su único gesto de arrepentimiento. A partir de ahí, disparó contra todo y contra todos: prensa, políticos, feministas, su archienemigo Tebas y hasta contra la mismísima Jenni Hermoso, a la que dejó por mentirosa al dar su versión de los hechos. "No voy a dimitir", dijo hasta en cinco ocasiones para dejar clara su postura.

Pero ¿Qué cambió de manera inesperada el escenario previsto?¿Cuál fue la clave para que Rubiales modificara su decisión poco antes de la Asamblea?

Poco ante de la esperada comparecencia del todavía presidente de la RFEF, "El Español" adelantaba el bombazo: "Rubiales se plantea no dimitir".

Y es que según apuntaba este medio, el informe interno realizado sobre los sucedido exculpaba totalmente a Rubiales, algo que le dio fuerzas y argumentos para lo que vendría después.

¿Qué dice ese Informe?

Según el documento desvelado en exclusiva por El Español, el beso no cabe considerarlo como acoso. El informe determina, por tanto, que "no existió conducta que invite a concluir que se forzó, violentó o agredió" a Jenni Hermoso.

El informe incluye declaraciones de varios de los presentes durante los hechos denunciados y varios de los testigos coinciden en que fue algo anecdótico. "Me dirigí a la jugadora Jenni Hermoso para preguntarle cómo se encontraba después de los hechos acontecidos con Luis Rubiales en la ceremonia de premiación. Tras hablar con ella, los dos coincidimos que fue algo anecdótico, fruto de un momento de alegría, euforia y de celebración mutua", señala el delegado antiacoso en la declaración a la que ha tenido acceso el citado medio.

Javier López Vallejo añade que no vio "en ningún momento" a Jenni Hermoso "afectada por los hechos relacionados con la ceremonia de premiación": "Así, por ejemplo, se entonó el cántico por todas las jugadoras de 'Rubiales, queremos otro beso' en el autobús del equipo desde el hotel al aeropuerto...", indica.

Un informe en el que también se recoge la versión de Luis Rubiales pero no de la propia Jenni Hermoso, que ha delegado su representación en este asunto al sindicatos de futbolistas FUTPRO.

Luis Rubiales consideró, tras conocer el documento, que este era una baza sólida para replantear su decisión. Pero el informe no parece reflejar el sentir de la jugadoras, que se han plantado en bloque tras el discurso de Rubiales, ni tampoco ha convencido al CSD que ya ha iniciado los trámites para inhabilitar al presidente de la RFEF con carácter de urgencia. La guerra no ha hecho más que comenzar.