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«Manos Limpias» pide su dimisión y los Jueces reprochan «el intento de presión»

El sindicato Manos Limpias, personado como acusación popular en el procedimiento en el que está imputado como persona jurídica el Fútbol Club Barcelona por un delito fiscal en el fichaje del brasileño Neymar, ha pedido hoy el cese del presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), Miguel Cardenal.

La petición ha sido cursada al ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, por entender que el artículo publicado por Cardenal en prensa titulado "Orgullosos del Barça""supone no sólo una injerencia en la justicia, sino también un comportamiento reprobable dado su cargo institucional".

"En las últimas semanas se han producido acontecimientos en otros clubes de fútbol (por poner un ejemplo, el Club de Fútbol Sevilla, con su ex presidente) donde, obviamente, se ha actuado con independencia y neutralidad a la hora de valorar esas situaciones, circunstancia que no se ha producido en el caso conocido como Neymar, y que afecta al Futbol club Barcelona", señaló el sindicato en un comunicado de prensa.

Manos Limpias afirmó en el mismo documento que "procede por regeneración democrática"el cese del presidente del CSD "por parte de su superior jerárquico".

Por su parte, el portavoz de Jueces para la Democracia (JpD), Joaquim Bosch, ha afirmado este miércoles que la opinión expresada por el presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), Miguel Cardenal, sobre la investigación en la que está imputado el Fútbol Club Barcelona por un presunto delito fiscal en el fichaje de Neymar constituyen un intento de "presión"sobre los tribunales y ha pedido al Gobierno que respete las actuaciones judiciales.

Bosch se ha mostrado de acuerdo con el fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Javier Zaragoza, en que el artículo firmado por Cardenal en 'el País' --en el que cuestiona la investigación del juez Pablo Ruz asegurando que el Bara está "acosado y acusado"-- constituyen una "injerencia"del poder ejecutivo en el poder judicial, al que hay que dejar actuar "de manera independiente".

"No resulta admisible que un cargo del Gobierno diga que un club es acosado, porque el Estado de Derecho actúa sin hacer distinciones y ningún club deportivo, organización, entidad o persona puede estar por encima de la ley", ha subrayado.

A su juicio, en este caso se ha intentado ejercer una "presión"sobre la Justicia que es especialmente "censurable"por proceder de un cargo del Ejecutivo. "Estas alegaciones están fuera de lugar y desde el Gobierno se deberían limitar a respetar la actuación de nuestros tribunales y a mostrar la necesaria lealtad institucional", ha insistido.