Fútbol

Mbappé, el "indeseable"

El delantero francés ya se entrena con los jugadores que no cuentan para el PSG de Luis Enrique. Su club lo quiere vender ya y el Real Madrid se mantiene en silencio y sin prisa

Kylian Mbappé, junto a su hermano en un entrenamiento del PSG
Kylian Mbappé, junto a su hermano en un entrenamiento del PSGAgencia AP

En la dura charla que Al Khelaifi dio a la plantilla del Paris Saint Germain el pasado martes, el dueño del club aseguró que los futbolistas que no viajaran a la gira de pretemporada en Japón no entraban en los planes de futuro del club. Una frase con un claro tono amenazador que tomó un carácter mucho más profundo cuando uno de los incluidos en la lista de descartes fue Kylian Mbappé. El nombre de la estrella se unía a la de los futbolistas que de verdad no cuentan para Luis Enrique: Colin Dagba, Diallo, Leandro Paredes, Wijnaldum, Julian Draxler y el último de los «indeseables», según palabras de la propia dirección deportiva del PSG: Mbappé, al que se le ha visto sonriente en los entrenamientos pero que parece que tenía claro que no se subiría a ese avión que marca un antes y un después en su historia en París.

Al Khelaifi quería esperar al día 31 de julio, la fecha límite en la que el futbolista y sus representantes pueden ejercer la opción de renovación automática de contrato hasta junio de 2025, para romper todos los puentes, pero a la vista de la posición del jugador parece haber decidido recortar los plazos y ponerlo ya en el mercado.

Que Mbappé no viaje a Japón es un drama para la entidad desde el punto de vista del marketing, porque evidentemente Kylian era la gran atracción para el mercado asiático junto a Neymar, que se ha quedado como la única estrella realmente mediática en el plantel de Luis Enrique. Así que dejarlo en casa no es una tontería e indica que el «caso Mbappé» entra en su recta final. Esta vez la cosa parece ir en serio y hay muchos millones de euros en juego para todos los implicados, que a día de hoy son el club francés y el delantero. El PSG tiene claro que no va a dejarlo irse gratis en 2024, que eso no es respetar el escudo y por ahí presionan al jugador, al que acusan de falta de patriotismo incluso y de no dejar un legado a la altura de su fútbol. Creen que hay un acuerdo entre Mbappé y el Real Madrid para llegar libre al Bernabéu en 2024, pero desde Valdebebas se niega ese extremo y se apuesta por la tranquilidad y el silencio. Incluso aunque ya haya empezado el chaparrón de rumores sobre la gran cantidad de clubes que estarían dispuestos a pujar por el jugador. Se apunta al Chelsea, al Liverpool e incluso a Arabia, donde tendrían ya preparados 200 millones. Ese precio tenía Mbappé hace justo un año y el ofrecimiento del Real Madrid fue rechazado por Al Khelaifi, que ahora está en una posición mucho más débil para negociar, porque ya es pública la ruptura con el «7» y su urgencia por venderlo para poder sacar de la parálisis la programación de la temporada que está a punto de empezar.

En las oficinas de Valdebebas están convencidos de que el tiempo corre a su favor y que el dorsal «9» siga estando libre a pesar de la llegada de Joselu y que el gasto del fichaje de Jude Bellingham se haya incluido en el ejercicio que se acaba de cerrar multiplica la ilusión de los aficionados blancos. El delantero galo se entrenó ayer por primera vez con los descartes y se paró a firmar autógrafos a los aficionados. La ruptura con el PSG es total y no se puede esconder, bueno para el Real Madrid.