Cargando...

Papel

Modric, el socio de todos

Modric, el socio de todos larazon

El Madrid espera encontrar con Modric su mejor versión para asaltar el Camp Nou

«Esto no es tenis», avisa Modric. El fútbol del Real Madrid respira mejor a través de las botas del croata, que ha vuelto de su lesión en el peor momento del equipo y muchos lo consideran el elemento que puede hacer cambiar la inercia. Él insiste en que un único futbolista no puede hacer nada solo, pero lo cierto es que su regreso le da al Madrid mucho de lo que necesita. Modric está en plena madurez deportiva y tiene una inteligencia táctica que agradecen todos los que tiene alrededor. Es el socio ideal de aquellos que están a su lado, porque en él encuentran alguien al que darle un problema y que les devuelve una solución.

Llevaba mucho tiempo siendo imprescindible, cuando el pasado mes de noviembre se rompió jugando con su selección. Era más fijo que Kroos en el centro del campo y, si a Ancelotti le hubieran dado a elegir de quién quería prescindir durante cuatro meses por lesión, puede que el último nombre que hubiera pronunciado fuese el del mediocentro. Luka ofrece dinámica gracias a su primer toque y sí tiene los mecanismos del mediocentro que le pueden faltar a los otros que juegan con él en el trío de medios. Es el primero que se coloca entre los centrales cuando el equipo se repliega sin el balón, y muchas veces ocupa el espacio que dejan a su espalda las subidas de los laterales. Tiene ese instinto defensivo que Kroos está aprendiendo de forma intensiva y que él interiorizó en Inglaterra.

«Mi posición ideal es la de “5”», afirmó el día de su presentación en el Bernabéu. Una frase que sorprendió a muchos, porque la idea general entre los menos relacionados con la Premier es que su melena rubia brillaba más en la mediapunta. Esto era verdad en los comienzos de su carrera, para después ir reciclándose en un futbolista más preocupado por el bloque que por su brillo personal. Es justo esto lo que hace ahora y por lo que el Santiago Bernabéu ya se ha puesto varias veces de pie para aplaudirlo. Él y James, justo los dos lesionados de más larga duración, son los madridistas que más aportan a la química del equipo, ese concepto importado del baloncesto y que no es otra cosa que intangibles que hacen que la cosa funcione.

Modric es capaz de achicar en defensa y también de darle ritmo al ataque con su regate corto, en el que con sólo un paso adelante es capaz de romper una línea enemiga y crear espacio para los delanteros. También es hábil para el último pase y es capaz de amenazar desde la frontal del área con su buen disparo, algo que ya ha comprobado esta temporada el Villarreal, por ejemplo.

«Todos estamos muy contentos de que Modric esté de vuelta. Nos va a aportar mucho», insistía Ancelotti cuando el croata iba consumiendo los plazos de recuperación. Sufrió un arrancamiento del tendón proximal del recto de la pierna izquierda, una lesión grave y tras la que cuesta volver a tomar confianza en el golpeo. Los doctores quisieron ir con calma y aunque en principio se anunciaba su vuelta para la ida de octavos de «Champions» ante el Schalke, fue en la vuelta cuando entró en acción. Fue una noche difícil, en la que la única buena noticia para el público fue ver otra vez a Modric. Ante el Levante regresó a la titularidad y fue el segundo futbolista blanco con más pases completados (74). Estuvo en el origen de las jugadas de los dos goles y no necesitó estar ni entre los seis jugadores del partido con más kilómetros para aportar más equilibrio al centro del campo.

Sin estar a tope, el Madrid confía en él para recuperar la versión del récord de victorias y el Camp Nou será su primer examen. Con él, tiene más sentido el 4-3-3 y los delanteros, más libertad.

Y el mejor Bale

Nada más llegar a Madrid, Bale se pegó a Modric. Ambos habían sido compañeros en el Tottenham y el croata dominaba mejor que nadie en el vestuario el inglés, así que era el mejor socio para que el galés iniciara la adaptación a su nueva aventura. Con el paso de los meses se hicieron inseparables fuera del campo y también dentro, algo que ha confirmado Ancelotti hace poco. «La presencia de Modric da más oportunidad a Bale de entrar en el juego, se conocen muy bien de cuando estaban en el Tottenham. Seguro que Bale está más cómodo con Modric». Las estadísticas dan la razón a esta explicación del técnico, porque los dos futbolistas suelen conectan entre ellos más que con el resto. En el encuentro contra el Levante, Modric dio 13 pases a Bale y sólo conectó más con Carvajal, pero en la parte defensiva del juego. En ataque, la tendencia del croata es progresar hacia la derecha y más de la mitad de los 74 pases acertados que hizo en el último partido fueron hacia la banda derecha, el lugar desde el que arranca el juego del galés.

Casualidad o no, Bale volvió a marcar tras nueve partidos con Modric a su lado y los dos serán titulares el domingo en el clásico que puede decidir gran parte del destino de la Liga.