MotoGP

Velocidad contra sabiduría

Rossi lidera con ventaja el Mundial a pesar de que Lorenzo es claramente más rápido

Jorge Lorenzo y Marc Marquez
Jorge Lorenzo y Marc Marquezlarazon

Este fin de semana se disputa el Gran Premio de Aragón de MotoGP en el circuito de Alcañiz.

El sonido de las cámaras de los fotógrafos arrecia cuando Rossi y Lorenzo hablan entre ellos durante la conferencia de prensa. No hay duda de quiénes son los que se están jugando el Mundial y cada gesto cuenta. A falta de cinco carreras, 23 puntos les separan, con Valentino por delante y Jorge convencido de que es posible: «Creo en la remontada». Él es el más rápido, pero hasta ahora no le ha servido para tomar la iniciativa, que es propiedad de Rossi y su sabiduría. «Jorge es más rápido, pero Valentino da el cien por cien y siempre está delante. ¿Un favorito? Desde el punto de vista de la velocidad, Jorge; desde el punto de vista de la experiencia y el manejo de las situaciones, Valentino», explica Márquez, que es el que los ve más cerca. «Lorenzo va más rápido, nos lleva a todos al límite y marca el ritmo. ‘‘Vale’’ saca provecho de todas las situaciones. La velocidad se tiene, la experiencia se aprende, y para tener la de Valentino hay que estar aquí 20 años como él», añade el todavía campeón, dibujando una radiografía perfecta de la situación en la que se encuentra la batalla por el campeonato.

Lorenzo es el más veloz con la pista seca, por momentos medio segundo por encima de su rival, pero Rossi tiene siete vidas y elige como nadie qué opción tomar cuando un elemento externo, hasta ahora la lluvia, cambia el decorado. «Me encuentro más fuerte que nunca», admite el número 99, que espera un fin de semana completo sin nubes. Rossi es consciente de que no le va a bastar con aliarse con la lluvia y va a necesitar ganar de aquí al final si quiere alcanzar la «Décima». «23 puntos son bastantes, pero igual no son suficientes», avisa. La guerra de la velocidad la tiene perdida –«el objetivo es encontrarla», confiesa–, pero las que tienen que ver con la experiencia, parecen de su lado. «Esta lucha es más difícil que las del pasado porque Jorge tiene una velocidad innata, que le permite ser fuerte en cualquier situación. Contra Gibernau o Biaggi yo era el más rápido. Ahora sucede al revés».

Ambos coinciden en que el episodio de este fin de semana en Aragón no será definitivo, pero sí marcará una tendencia antes del decisivo tríptico en Japón, Australia y Malasia. «No es un todo o nada, pero si quedo por delante, mejorarán las cosas», concluye Lorenzo, que espera que los paraguas se mantengan cerrados.