Márquez, un año después

"El año pasado estaba aquí muy nervioso por debutar en MotoGP, y ahora soy el campeón", decía Marc Márquez en la primera conferencia de prensa de la temporada 2014. Él tuvo el honor de ser el primero en tomar el micrófono después de su sorprendente 2013, en el que pasó de "rookie"prometedor a piloto de leyenda por conseguir antes que nadie el máximo título del motociclismo. Es el "jefe"del circo de las dos ruedas, al menos hasta que el asfalto y las carreras puedan cambiar los pronósticos. Marc llega a Losail después de un mes parado y con la rotura de peroné todavía fresca, pero por mucho que la teoría diga que debería tomárselo con calma, que nadie se atreva a hacer pronósticos. "Estoy mejor, pero no sabré mi nivel hasta que me suba a la moto. Seguramente necesitaré un poco de tiempo para estar en ritmo. Es difícil porque he perdido más de un mes de entrenamientos y hace cinco días no podía ni caminar. Ahora sí camino y si puedo hacerlo creo que también puedo estar bien encima de la moto", dice Márquez, que teme especialmente las largas distancias y las curvas de derechas, la mayoría en el circuito de Losail, se ve competitivo a una vuelta. Lo malo es que con el paso de los kilómetros la lesión podría hacerle bajar su rendimiento. La inactividad, el haberse perdido dos test, no lo ve como un gran problema.

Se prevé un campeonato muy igualado en el que cada punto será decisivo, por lo que sus rivales tratarán de aprovechar cualquier debilidad en el campeón. Lorenzo y Pedrosa están satisfechos con su pretemporada, en la que han podido probar la adaptación de sus motos a las nuevas reglas, especialmente a los 20 litros de gasolina en el caso de las motos oficiales.

"Creo que serán suficientes para acabar la carrera", bromeaba Jorge Lorenzo, que asegura no estar al ciento por ciento tras un verano en el que ha entrado varias veces por el quirófano para "reparar"secuelas de sus últimas caídas.

Pedrosa ha completado un invierno sin contratiempos y aseguró tener ganas de abrir gas tras muchos meses sin competición. Rossi pidió tiempo para ver cómo será el Mundial, o concretamente las carreras, y vaticinó un panorama distinto en la parte delantera, con más pilotos competitivos gracias a la nueva normativa Open. Aquí entra en escena Aleix Espargaró, que ha deslumbrado en los entrenamientos y está alucinando con su nueva moto: "Visto lo visto, creo que mi decisión de cambiar fue acertada. He estado cerca de los mejores en pretemporada y ojalá que lo pueda mantener mucho tiempo. Es fantástico y va a ser un campeonato muy entretenido", concluyó.

Mañana jueves los pilotos pasarán de las palabras a la acción con los primeros entrenamientos libres del Gran Premio de Qatar, que enciende los focos (es el único GP nocturno) del Mundial 2014.