Moto 2
Moto 2: En el nombre de la madre
Emocionante primer triunfo de Tito Rabat, que recordó a su progenitora fallecida en febrero de 2012¡
Tito Rabat se emocionó mientras sonaba el himno de España en homenaje a su victoria y no todas las lágrimas eran de alegría. La mitad de ellas venían de la nostalgia y del dolor de perder a una madre. Cuca, que era como todos conocían a María Dolors Bergalá, falleció en febrero de 2012 y su hijo ganó ayer su primera carrera en su honor. «Se lo quería dedicar a ella, lo tenía preparado desde hace tiempo y estoy convencido de que me ha ayudado a conseguirlo». Tito es todo corazón y después de muchas carreras ha dado con la fórmula de la victoria. La receta, según él mismo, se compone de experiencia, madurez y mucho trabajo porque «si das el callo tienes todo lo que te mereces». Rabat siempre ha sido un personaje especial, un bohemio enamorado del motociclismo, que ahora se machaca física y mentalmente al tiempo que ha empezado a cuidar su alimentación. Comparte entrenamientos con Marc Márquez, de quien es muy amigo, y parece que da resultado: «Lo bueno que tiene ir al gimnasio y haber cogido músculo es que puedes levantar la moto y acelerar más que antes. Es erróneo pensar que si pesas más corres más. Es justo al revés», explicaba.
Su carrera fue un monólogo, porque tenía un buen ritmo y sabía que la escapada era posible. Tiró a tope y el esfuerzo mental, más que el físico, hizo el resto: «Se me ha hecho bastante larga, principalmente las últimas cinco vueltas. Cuando vas solo y no ves nada delante es difícil estar concentrado todo el rato. Cuando se me iba la cabeza, me imaginaba que estaba tranquilo en el circuito de Almería en el que entreno. Cuando me despistaba volvía otra vez a este pensamiento, y así todo el rato», confesaba el hombre más feliz del mundo en ese momento. «Es una pasada», añadió.
Su aparición en los puestos de honor ha sido la gran sorpresa del comienzo de curso en Moto2, donde se esperaba a su compañero de equipo, Pol Espargaró, actual subcampeón. Parece que la presión de ser el máximo favorito le está pasando factura y él se queja de que además no acaba de encontrarse cómodo con la moto. Todo lo contrario que Tito, brillante en el día de la madre.