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Nadal intimida en su arranque en Montecarlo:

Arranca la gira sobre tierra batida con una victoria contundente (6-1 y 6-1) ante Roberto Bautista

Nadal, durante su última participación en Montecarlo, en 2019. En 2020, el torneo no se disputó por la pandemia
Nadal, durante su última participación en Montecarlo, en 2019. En 2020, el torneo no se disputó por la pandemialarazon

Arranca la gira sobre tierra batida con una victoria contundente (6-1 y 6-1) ante Roberto Bautista

El Nadal de toda la vida, el mejor jugador de la historia sobre tierra batida, reapareció en Montecarlo. Un mes después de disputar su último partido oficial en los cuartos de final de Indian Wells, Rafa regresó. Y lo hizo a lo grande ante Roberto Bautista. En un test de calidad, el once veces campeón en el Principado se impuso por 6-1 y 6-1 en 77 minutos.

Bautista Agut era una prueba de nivel para comprobar el estado del tenis de Rafa. El tío Toni, presente en Montecalo, ya había avisado de que le había visto entrenarse y golpear a muy buen nivel en Manacor. Y el estreno lo ratificó con 25 minutos perfectos. Fue un arranque intimidatorio. Tanto para el castellonense como para el resto de raquetas que se encuentran en el Principado. «Estoy preparado para ganar por duodécima vez el torneo», pareció decir Rafa de salida. Fueron cinco juegos de manual. Aplicó su libro de estilo sobre arcilla roja con una precisión quirúrgica. Dominó los intercambios, mandó al rival lejos de la línea, le movió de un lado a otro de la pista sin tregua, restó con altura y profundidad, abrió ángulos imposibles, devolvió golpes muy complicados haciendo mucho daño... En menos de media hora ya mandaba por 5-0. Un par de breaks para ratificar su dominio y sólo un juego cedido fueron el balance de la primera manga.

En la segunda hubo más pelea pese a que en el arranque se mantuvo la tendencia del set anterior. A la tercera oportunidad en el primer juego, Nadal sumó un nuevo break. Bautista, el único jugador español que este año ha levantado un título -Doha- y la única raqueta de la ATP que ha derrotado en dos ocasiones en 2019 a Djokovic, trató de resistir. En el tercer juego conectó su primer winner y en el cuarto dispuso de tres bolas de break para equilibrar el parcial. Ahí volvió a aparecer el Nadal de siempre. Salvó las tres y el de Castellón lanzó su raqueta al suelo. En su siguiente saque, Rafa salvó dos bolas de break más y Bautista se rindió.

Nadal, campeón 11 veces en Montecarlo, al igual que en Barcelona y Roland Garros, ya acumula un balance en el torneo de 69 victorias y sólo cuatro derrotas (Coria en 2003; Ferrer en 2014 y Djokovic en 2013 y 2015), con lo que roza el 95 por ciento de triunfos. El año pasado llegó sin jugar un partido desde el Abierto de Australia. Dio igual. Derrotó en la final a Nishikori y sólo permitió dos juegos por set. Este año no juega desde el 16 de marzo debido a una tendinitis rotuliana en la rodilla derecha y su arranque ha sido intachable. Rafa defiende en la gira de tierra batida 4.680 puntos por los 855 que protege Novak Djokovic.