Neymar calla y el Barça tiembla

La directiva confía en que sus compañeros de la plantilla le convenzan para que descarte la opción de marcharse al PSG.

Mientras Josep Maria Bartomeu asegura que Xavi Hernández será algún día entrenador del Barcelona, Neymar sigue sin abrir la boca sobre su futuro y el indisimulado interés del PSG por hacerse con sus servicios. La estrella brasileña, que ayer participó en un acto ajeno al club de una marca deportiva, no ofrece ninguna pista para aclarar su futuro. Es más, alimenta las dudas con una imagen en la que aparece tumbado y pensativo en el campo de entrenamiento de la concentración del Barça en Estados Unidos.

Las últimas horas han generado nerviosismo en el club azulgrana porque el jugador y su entorno no han ofrecido pista alguna sobre la intención de continuar en el Camp Nou. Después de que la televisión brasileña Esporte Interativo anunciara que el PSG pagará su cláusula de rescisión de 222 millones de euros, y que Unai Emery afirmase que el «PSG trabaja por traer a los mejores jugadores», no ha habido acercamiento alguno entre las partes. Hay más, Catalunya Ràdio aseguró que el padre del futbolista tiene firmado un documento que le daría más de 40 millones de prima de contrato y Radio Montecarlo informó de que Neymar sénior se va a encontrar en breve con los representantes del jugador. Más madera para un culebrón que amenaza con prolongarse.

El canal televisivo también aseguró que el club parisino pretende hacer el anuncio del fichaje dentro de dos semanas, tras abonar la totalidad de la cláusula –lo que le convertiría en el fichaje más caro de la historia– y que incluso Neymar podría no regresar con el Barça de la gira estadounidense.

El delantero brasileño, de 25 años y que lleva cuatro temporadas en Barcelona, habría sido convencido por la directiva del PSG para liderar el nuevo proyecto del club francés. Otro de los motivos citados por Esporte Interativo para el cambio de club de Neymar sería la llegada a París de su compatriota y amigo Daniel Alves, que se ha convertido en el mejor embajador del PSG. No es el único brasileño en la plantilla de Emery. Thiago Silva, Marquinhos, Lucas Moura y el ya retirado Maxwell también están en París mientras que del clan brasileño en el Barça sólo sobrevive Rafinha, después de las salidas de Alves, Adriano y Douglas.

Los responsables del club intentan trasladar la sensación de que Neymar va a continuar. Bartomeu pretende transmitir al jugador que en ningún club tendrá más opciones de ganar títulos que en el Barça, junto a Messi y Luis Suárez, y se confía en que la amistad con el argentino y el uruguayo acabe con sus dudas. También se confía en que el resto de la plantilla (Piqué, Iniesta, Busquets...) le muestre su apoyo y que el núcleo duro de jugadores le comunique que le considera imprescindible para el futuro inmediato del equipo. Otra de las razones que esgrime el Barça es que el club francés podría incumplir el «Fair Play» Financiero con su contratación, con lo que se arriesgaría a una sanción que le impediría jugar la Champions.