¿Perjudicó Velasco Carballo a Colombia?

José Damián González: Sí

Arbitraje sutil y cacería a James

Si la FIFA ha felicitado a Velasco por su arbitraje es que lo hizo mal y que perjudicó a Colombia; blanco y en botella, la releche. Así que apaga, vámonos y aquí se acabaría el debate. Pero como te conozco, Juanfe, y sé que me vas a hablar del reglamento, de asuntos de leyes disciplinarias que demasiados colegiados convierten en decisiones leguleyas y con una disparidad de criterios tan monumental como laberíntica, hablemos de fútbol, de arbitraje y hagamos un simple repaso a la actuación sutilmente anticolombiana de Velasco Carballo.

Persecución

A James le hicieron ¡12 faltas, 12!, pero de manera escalonada, con jugadores distintos y en fila india, uno después de otro para no incurrir en reiteración de un solo cazador, evitar la tarjeta y engañar así al colegiado. Orden de Scolari, nada nuevo en el mundo del fútbol. Javier Aguirre lo puso en práctica en el Atlético contra el madridista Guti, y Juande Ramos dirigiendo al Madrid en el Camp Nou contra Messi. Cosieron a patadas al chaval y resulta que James hace una y le saca tarjeta; de eso se quejaba la joven estrella colombiana.

Itém más. En el gol anulado, que era el 1-1, cuando se bota la falta, Yepes parece estar en fuera de juego, pero no toca el balón. Velasco Carballo deja seguir la jugada, hay una serie de rechaces y Yepes marca. Gol legal. Y si hablamos del penalti, es roja y no amarilla para Julio César, de cajón.

La experiencia y un consejo

Sólo puedes agarrarte al error de no expulsar a Zúñiga por romperle una vértebra a Neymar en un salto de expulsión para defender que Velasco no perjudicó a los colombianos. Mira, Juanfe, te lo digo desde la experiencia de 37 años viendo y contando de fútbol y arbitrajes. Vas camino de ser un buen colegiado, pero te aconsejo que tires de historia, revises partidos de hace algunos años y copia lo que hacía el maestro: fíjate en Ramos Marcos.

Juanfe Sanz: No

¡Cómo os gusta llorar!

Velasco Carballo no perjudicó a Colombia. De hecho, pudo expulsar a Zúñiga en una acción muy dudosa y no lo hizo. Dejó jugar, como siempre estamos pidiendo, y acertó en las áreas con el penalti señalado a Julio César sobre Bacca y el gol anulado a Yepes. Hizo un gran arbitraje, como ha valorado la FIFA, en un partido complicadísimo. ¿Se le critica por la lesión de Neymar? No es su culpa. El árbitro no puede verlo todo, y es muy difícil pensar que un jugador vaya a romperle la espalda a otro. Con la de veces que hemos debatido viendo las imágenes en televisión y no llegamos a una conclusión. Es una diferencia de criterio. No es una acción clara y no tiene nada que ver con el mordisco de Suárez. En las calles se sigue robando aunque estén llenas de policías.

Julio César, amarilla correcta

Pareces un colombiano más, Damián, indignado con Velasco porque no expulsó a Julio César. Pero ahora no es ni una cuestión de criterio: esta vez es de reglamento. Hay que conocerlo y dominarlo. Lo de Bacca no era ni por asomo una ocasión manifiesta de gol, porque venía David Luiz como una moto a interrumpir su avance y cortar la jugada. A nosotros nos lo explican en las reuniones constantemente: para que sea una ocasión manifiesta, la jugada siguiente tiene que ser prácticamente gol.

Dejó jugar y eso se le pide

¿Permisividad con Brasil? Es que ya directamente me tengo que reír. Siempre estás haciendo circo con los árbitros, Damián, y te crees que somos los payasos de esto. No podemos estar pidiendo en España a todas horas que se acabe con los piscineros, que se permita el contacto y que se deje fluir el juego... Y ahora, cuando un árbitro español lo hace en un Mundial, le matáis. Deberíamos aprender de grandes colegiados, como los que hay en la Premier. Como Mateu Lahoz. Como Velasco Carballo. Lo que pasa es que en España nos gusta mucho, demasiado, llorar.