Nadal: «Lo que quiero es seguir estando sano»

«Lo que ha conseguido Rafa aquí parece algo que nadie podrá repetir», insisten uno tras otro Costa, Corretja, Moyà... «Extraterrestre», lo define Alberto Berasategui. Todos son campeones o finalistas de Roland Garros, conocedores de lo difícil que es levantar sólo un título allí. Pues Nadal lleva ocho, para sumar doce «grandes» en total y quedarse a tiro de dos de Sampras (14) y de cinco de Federer. «A día de hoy, los 17 "Grand Slam"están a años luz», reconoce el manacorense. «Hay que ir poco a poco, no hay que pensar demasiado, pero si alguien puede superar a Federer es Rafa», piensa David Ferrer. Objetivos como ése pueden estar en lo más profundo de su ser, pero después de estar siete meses parado por una lesión, pisa la tierra con los pies y con la cabeza. Reflexivo. «Lo que busco es intentar mejorar en cada momento, jugar con toda la pasión que tenga, disfrutar de estos momentos y disfrutar de la competición», dice. «Lo que quiero es seguir estando sano y poder competir como hasta ahora. Hace cinco meses nadie de mi equipo creía en un regreso como éste y aquí estamos», continuó. «La motivación es amar el deporte, valorarlo y disfrutar de lo que uno hace», insiste el español, incrédulo ante lo que está logrando. «No sé cómo hemos hecho para estar otra vez aquí porque no hemos entrenado mucho tenis en esos siete meses», continuó. «Para mí, volver de una lesión es la clave, porque sé el trabajo y el tiempo que cuesta. He hablado con él y me ha dicho que está bien», aseguró Usain Bolt, el supercampeón olímpico, encargado de darle la Copa de los Mosqueteros a Rafa. Después de esos siete meses de parón llegaron las victorias, pero sin sensaciones buenas, que poco a poco fueron aflorando. La rodilla iba ocupando cada vez menos parte del cerebro, empujada por el tenis, aunque siempre quedaba un hueco para la lesión. «Hace unas semanas no me sentía bien, pero en las dos últimas semanas la sentía mejor. Aguanta partidos duros. Ante Djokovic no tuve sensaciones horribles», reconoció el que mañana será número cinco del mundo. «Cuando realmente necesitas apoyo es cuando las cosas no van bien, cuando estás lesionado. Cuando estás un poco triste y recibes todo ese apoyo, te da energía positiva», insistió. Ahora, Rafa vuelve a ser el terrible jugador de antes. El inhumano. «Nunca vi una mentalidad como la suya», admite David Ferrer. Parece que Nadal nunca se equivoque, nunca dude. «Los que no dudan es porque son arrogantes. Por supuesto que tengo dudas, pero trabajo para estar aquí. Si no trabajas es seguro que no vuelves», añade el manacorense. Dudas tuvo también al comienzo del torneo, después de unas primeras rondas en las que no encontró su juego, o antes de afrontar la final. «Cuando llegas a Roland Garros tienes una presión muy grande, vienes de ser el mejor del mundo en tierra. Cuando estás así, si pierdes Roland Garros es una decepción inmensa. Eso te añade una presión muy grande. Todo lo que consigues vale menos. Rafael había ganado muchas veces a David, pero hoy [por ayer] era el partido más importante. Si lo pierdes es un desastre», analizó su tío y entrenador, Toni Nadal.

Trabajo es una palabra que Nadal aplica para sí y que destaca en su rival de ayer, David Ferrer: «David ha trabajado mucho durante toda su carrera y le está dando sus frutos. Todo el trabajo que ha hecho le ha servido para ser mejor y eso es un gran ejemplo». «Si crees que no puedes mejorar no sabes nada de la vida porque se puede mejorar siempre, y en tenis también. Eso no significa que vayas a ganar más. Ganar o perder depende de diferentes factores como la mentalidad, la suerte...», insiste Nadal. «Creo que a David le ha faltado algo de ritmo en las piernas. Las otras veces contra nosotros salió con una gran intensidad de piernas», opina Toni Nadal.

Descanso y la hierba

Después de la tierra llega el reto de la hierba. Lleva mucha paliza en el cuerpo y por eso ha renunciado al torneo de Halle para descansar en Mallorca. «El mejor regalo que me hace Mallorca es la tranquilidad, poder volver a mi vida normal, porque lo que vives tras un torneo como éste no es la vida real. Eso no tiene precio», expresa. Irá a Wimbledon, que comienza el 24 de junio, sin pisar antes el césped. «No es lo ideal, es el torneo más impredecible. A ver cómo llego», admite Rafa. «Todavía voy semana a semana, día a día», añade el campeón. «Su objetivo no es ganar más Roland Garros o no, es mejorar y en tres semanas estar a tope otra vez para afrontar un nuevo Grand Slam», interviene Álex Corretja, capitán de la Copa Davis. «Mi objetivo está cumplido. A partir de ahora, a seguir en la misma línea de juego. No creo ni en grandes euforias ni en grandes dramas», concluyó Rafa, al que la lesión le ayudó a comprender algo: «Sé que esto no durará siempre».

«Preferiría ganar y que él fuera cuarto en el ranking»

David Ferrer tenía sensaciones contradictorias después del partido: «Es extraño. Hoy he perdido la final contra Rafael y mañana voy a ser número cuatro del mundo y él, cinco. Se lo cambiaba». Pese a perder, el de Jávea superará a Nadal en la clasificación mundial, pero sólo en eso pudo derrotarlo ayer. «Para ganar a Rafa en tierra tengo que jugar más agresivo, finalizar los puntos en la red y jugar mi mejor tenis. Cuando la pista está lenta es muy difícil, porque tiene más poder que yo en los golpes», explica el finalista de Roland Garros. La de ayer era una nueva experiencia para él, que nunca había llegado al último partido de un «Grand Slam». «Salí un poco nervioso, pero he pasado más nervios en Copa Davis», dice. A pesar de todo, Ferrer se sintió satisfecho con lo conseguido. «Me he visto bien. La final ha sido mucho más disputada de lo que muestra el resultado», comentó tras la derrota. «El partido estuvo bien. Me voy tranquilo; intenté hacerlo lo mejor que pude».