Cargando...
Sección patrocinada por

Hípica

Toté Vignau, primero amazona y después juez

La catalana es una de las jueces más respetadas en su disciplina

Toté Vignau, jueza de Doma Clásica y amazona Chacco Marketing

Toté Vignau lleva toda la vida dedicada a la Doma Clásica. Su trayectoria la ha convertido en una de las voces más respetadas dentro del estamento de jueces de la disciplina. Ella deja claro que "nunca he dejado de ser amazona. Primero amazona y después juez".

Aunque ya no compite, sigue montando a diario y siente la equitación desde dentro, algo que considera imprescindible para juzgar con criterio y empatía. La transición hacia el rol de jueza fue una decisión natural y con un propósito claro: "Me hice jueza mientras competía para entender las notas y lo que quería decir cada comentario". Desde entonces, su implicación no ha hecho más que crecer. Lo asume con la máxima responsabilidad, consciente de la influencia que esto puede tener en la evolución del deporte. "Hay que estudiar mucho, observar al detalle y tener claro que el respeto por el jinete y el trabajo detrás de cada binomio debe ser la base de todo", asegura a LA RAZÓN. Cuando se le pregunta acerca de los valores que busca en un binomio, Toté lo resume en una palabra: armonía. "Un buen jinete es aquel que ayuda al caballo a ser mejor, a moverse mejor". Por eso, pone especial atención en el asiento, en la fluidez y en cómo se emplean las ayudas. Juzgar no solo es encontrar errores. Es, sobre todo, saber reconocer la calidad y premiarla. "Lo difícil no es ver los fallos, lo difícil es saber qué nota asigno a una calidad espectacular", apunta. Por eso insiste en que un buen juez no debe dejarse llevar por prejuicios ni por lo conocido. "Cuando me siento en la caseta, lo hago con la mente en blanco. Cada binomio es un libro por escribir", dice Toté Vignau.

La Doma Clásica en España está creciendo: más jinetes, más concursos y más calidad en los caballos, pero... "Ojalá que no se pierda la calidad por tanto volumen", resalta. Montar bonito, con sensibilidad y conocimiento es más importante que escalar rápido de nivel. Y en la evolución de la disciplina en España, habla del aumento de mujeres en la Doma. "La mujer y los caballos están de la mano. Hay una sensibilidad femenina que encaja muy bien con esta disciplina", cuenta.

Además de su labor como juez, Toté Vignau forma parte activa de la Asociación Española de Oficiales de Competiciones Ecuestres (AEOCE). Desde su cargo como responsable de prensa trabaja por una comunicación transparente, cercana y constructiva entre los oficiales y el resto de actores del sector. Su objetivo es el de contribuir a que los jueces estén mejor preparados, más conectados con la realidad y estén dispuestos a aprender y dialogar. "Todo se puede hablar, incluso lo más delicado. Es sano hablarlo y comunicar", detalla. Esa es su filosofía. Para quienes se sienten frustrados por las notas, Toté ofrece un mensaje: "No hay que tener prisa. Este es un deporte de largo recorrido. Hay que prepararse por encima del nivel al que se compite".

Toté defiende la humildad, el aceptar las notas como una herramienta de aprendizaje y la confianza en el proceso: "Ningún juez quiere poner malas notas. Todos queremos poner ochos y dieces, pero tienen que ganárselos". La catalana concluye con una frase que resumen su forma de vivir la equitación: "Este es un deporte maravilloso. Lo importante es tener ilusión para aguantar los días malos y aprender de todo". Ella estará del 1 al 4 de mayo juzgando en el CDI 3* Las Cadenas (Madrid).