Vitolo jugará por tercera vez esta temporada en el Sánchez Pizjuán, el campo que lo idolatraba y que ahora le pita.

Vitolo cuenta sus regresos al Sánchez-Pizjuán por derrotas. Ya van dos, uno con la camiseta de Las Palmas y un segundo en Copa del Rey con el Atlético de Madrid en el que no jugó ni un minuto. El sevillismo, en pleno éxtasis sabiéndose vencedor de la eliminatoria, incluso se mofó del canario solicitando a Simeone que lo sacara al campo. «Cholo, saca a Vitolo» fue el cántico. A Vitolo se le ha hecho un mundo volver al estadio que lo idolatró. Hasta ahora, ha sido un trago.

El ambiente previo en la jornada quinta fue de alta tensión. A la hora de la verdad, el Sánchez-Pizjuán no pasó de los pitos esperados. Matizando, de una pitada de época cada vez que el canario tocaba el balón. En realidad, poca cosa para los sensibles oídos de los informadores de la Liga. Nada más empezar el partido, Las Palmas realizó un cambio de orientación del juego. La pelota voló por el cielo de Sevilla y allá que Gabriel Mercado sacó el codo a pasear para impactar en el rostro de Vitolo. Jamás una bienvenida resultó tan desagradable. A partir de ese momento, el exsevillista jugó cohibido. No se le recuerda ninguna jugada meritoria. Tuvo que ser sustituido al resentirse de sus molestias musculares. Algunos diagnósticos apuntaron a que el estrés mental acumulado fue una de las principales causas de la recaída. En lo que más importa, el resultado, el Sevilla venció 1-0 en un partido que necesitó de mucha paciencia.

Tras esa gris etapa en el equipo de su tierra, el grancanario trata de abrirse hueco en el coriáceo equipo de Simeone. Se ajusta perfectamente a la competitividad y pierna dura que exige el entrenador argentino, si bien por las piruetas inexplicables del fútbol hasta el momento sigue sin ser un fijo en las alineaciones. Vitolo aterrizó a primeros de enero en el Atlético. Ya se han disputado desde aquella fecha siete encuentros de Liga. Sólo ha sido titular una vez, en Málaga, siendo sustituido a los 53 minutos. En cuatro partidos no fue ni alineado y en los dos restantes, ante Girona y Las Palmas, jugó diez minutos en cada uno. Sí viene de cuajar una buena actuación en el pasado encuentro de Liga Europa ante el Copenhague.

Los planes de Simeone para hoy son una incógnita. Posiblemente salga de titular. En el Sevilla se percibe un ambiente más calmado. El efecto novedad se ha perdido, lo cual no quita que Vitolo vuelva a ser uno de los focos del encuentro. Realmente, el Sevilla ya ha pasado página. La vida le va bien sin el extremo y cobró una millonada por la operación, casi 40 kilos. Sigue peleando en los juzgados por que ese importe se incremente hasta los 50, motivo por el que denunció a todos los intervinientes en la operación. Mientras la Justicia sigue sus pasos, el internacional volverá a ser la amenaza. Más que venganza, Nervión quiere victoria. Si es con Vitolo enfrente, claro que sabrá mejor.