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Renfe y Ferrovial logran un acuerdo para salvar el empleo de los 2.000 trabajadores del servicio a bordo

La operadora prorrogará hasta diciembre el contrato del grupo de construcción y servicios

Sanidad ha eliminado las limitaciones a la ocupación de los vehículos respecto al total de plazas sentadas
Sanidad ha eliminado las limitaciones a la ocupación de los vehículos respecto al total de plazas sentadasLa Razon

Los 2.000 trabajadores que Ferrovial tiene contratados para prestar los servicios a bordo de los trenes AVE y de larga distancia han logrado in extremis conservar sus empleos. El consejo de administración de la operadora pública ha ratificado hoy el acuerdo alcanzado ayer con el grupo de construcción y servicios para renovar el acuerdo hasta finales de año, según ha informado en un comunicado la compañía pública.

Según ha explicado Renfe, el acuerdo conlleva una “reorientación de los servicios a bordo” que se prestan en los servicios comerciales de Renfe, tanto por medidas de seguridad sanitaria como por el descenso de la demanda. Desde el pasado 14 de marzo, con motivo de la declaración del estado de alarma motivada por la pandemia de coronavirus, Renfe se vio obligada a diseñar un nuevo plan de transporte, por el cual se anuló toda su oferta de servicios comerciales (Ave y larga distancia), así como Media Distancia y Avant, y se sustituyó por otra oferta ajustada a la aplicación de la normativa contemplada durante el estado de alarma. De esta manera, la operadora pública ha tenido que reducir sus servicios de AVE a un 20% de sus trenes habituales, de los que, además, solo puede vender un tercio de las plazas. Asimismo, desde el primer momento suprimió los servicios a bordo de restauración, reparto de auriculares y de prensa, y venta de artículos. Estos servicios se retiraron por dos motivos: por razones de seguridad sanitaria, y por el importante descenso de viajeros, pues la demanda en el Ave ha caído un 98% desde el 14 de marzo.

Reorientación de servicios auxiliares

Renfe asegura que, en la actualidad, “nos encontramos ante un escenario en el que se desconoce cuándo y cómo se restablecerá la normalidad en la circulación de trenes y en la movilidad, que permitan a Renfe recuperar esos viajeros y, por tanto, esos servicios de restauración, venta a bordo y reparto de prensa y auriculares”. Por ello, Renfe y Ferrovial han acordado reorientar los servicios auxiliares que se prestarán a bordo de los trenes, de manera que se centrarán fundamentalmente en la información y atención a los viajeros, y el acompañamiento de menores en el caso de que sea necesario.

Según ha explicado el sindicato USO, los 2.000 trabajadores afectados por el contraron no se quedan en la calle, pero un 97% pasa directamente a formar parte de un ERTE por causa de fuerza mayor por el coronavirus y solo 60 personas seguirán prestando servicio, repartidas en las oficinas centrales de Madrid y Barcelona.

El acuerdo culmina así cuatro días de vértigo para estos trabajadores. El lunes, el consejo de administración de Renfe acordó no renovar el contrato que terminaba hoy. Sin embargo, el martes, tras la denuncia de los sindicatos de que el Ministerio de Transportes había dejado “tirados” a los trabajadores, la empresa pública dio marcha atrás y entabló negociaciones con Ferrovial, que han culminado en el acuerdo sellado hoy.