Crisis

El frenazo del gasto público y la mejora de la recaudación recortan un 28% el déficit

El agujero de las administraciones públicas fue de 36.074 millones de euros en los cinco primeros meses del año. Los ingresos por impuestos se disparan un 20%

La ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero
La ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús MonteroA. Pérez MecaEuropa Press

El conjunto de las administraciones públicas españolas –salvo las corporaciones locales– acumularon un déficit de 36.074 millones de euros entre enero y mayo, una cifra que equivale al 2,98% del PIB y que es un 27,7% inferior a la del mismo periodo del pasado año. Según el Ministerio de Hacienda, los datos de ejecución presupuestaria se ven impulsados por el efecto positivo de la reactivación económica gracias al avance de la vacunación. Esta corrección del déficit se debe principalmente al aumento del 15% en los ingresos, impulsados por la recaudación tributaria, que se dispara un 20,6 % en comparación con un ejercicio 2020 marcado por el estado de alarma y la paralización económica.

La recaudación por IRPF aumentó un 31,5%; la de IVA, un 16,8%; y la del impuesto de sociedades, un 42,1%. Los gastos se mantuvieron estables en la primera mitad del año (un 0,1% menos), con una fuerte reducción del gasto asociado a la pandemia, que pasa de 15.639 millones en la primera mitad de 2020 a 5.351 millones este año.

De esta manera, el déficit público al cierre de mayo se encontraba todavía lejos de la previsión para el conjunto del ejercicio, que es del 8,4% del PIB. El desglose por subsectores muestra que la Administración central concentraba al cierre de mayo la mayor parte del déficit (31.365 millones, un 5,1% menos), por debajo de la referencia del 6,3% del PIB para final de año. La Administración central ha asumido la mayor parte del gasto asociado a la pandemia a través de transferencias a otras administraciones. El importe de los gastos del Estado relacionados con la pandemia ha sido de 5.351 millones, de los que 4.791 millones fueron transferencias a las comunidades autónomas y 559 millones, gasto en los consumos intermedios, que se corresponde casi en su totalidad las vacunas.

Más intensa fue la reducción del déficit de los fondos de la Seguridad Social (-80%, hasta 2.971 millones), gracias al aumento de las cotizaciones sociales y la reducción de los gastos.

Las comunidades autónomas redujeron un 11,6% su déficit, hasta los 1.738 millones, un 0,14% del PIB, cuando su previsión para fin de año es del 0,7%. Cinco comunidades lograban superávit: Andalucía, Asturias, Castilla y León, La Rioja y País Vasco. Las comunidades acumularon en esos cinco meses 3.063 millones de gasto sociosanitario ligado a la pandemia, un 0,25% de su PIB, un porcentaje que fue especialmente elevado en Castilla-La Mancha (0,43%) y Murcia (0,38%).

Además de los datos consolidados, Hacienda ha publicado información más actualizada, del conjunto del primer semestre, de la ejecución presupuestaria del Estado, que cerró junio con un déficit de 35.665 millones de euros, un 25,9% menos que un año antes y que equivale al 2,95% del PIB.