Finanzas

Los ahorros de los españoles, en máximos

Las familias se protegen frente a la crisis del coronavirus e incrementan sus depósitos en 50.000 millones en julio, hasta los 942.800

Sede del Banco de España en Madrid
Sede del Banco de España en MadridJavier LizónAgencia EFE

La gran esperanza blanca de la recuperación para muchos economistas es que, una vez controlada la pandemia del coronavirus, el ahorro que han ido acumulando en los meses pasados las familias por la imposibilidad de gastar o el temor a hacerlo dispare el consumo e incentive una vigorosa recuperación. Pero, por el momento, la prudencia está pudiendo más que la emulación de los «felices años 20» del siglo pasado que muchos desean. Según los datos del Banco de España, los depósitos que las familias españolas tenían en los bancos a cierre de julio se situaron en 942.800 millones de euros, la cifra más alta de la serie histórica que comienza en 1989, tras crecer un 5,6% respecto al mismo mes del año anterior, cuando se situaron en los 892.100 millones, lo que supone un aumento de cerca de 50.000 millones. Respecto al mes anterior, cuando ya se había registrado un récord de 941.700 millones de euros, el avance es de casi el 0,12%, según los datos provisionales actualizados hoy por el organismo regulador.

Depósitos de los hogares españoles
Depósitos de los hogares españolesTeresa Gallardo

El incremento de julio es muy significativo porque se trata de un mes en el que tradicionalmente los ahorros depositados en los bancos disminuyen al juntarse una serie de gastos importantes como son las vacaciones, la liquidación de los autónomos del segundo trimestre y el primer plazo de la declaración de la renta. Sin embargo, la irrupción de la pandemia ha impulsado a las familias a sujetar los gastos en previsión de la crisis económica que, efectivamente, llegó después de la sanitaria. Desde marzo del año pasado, cuando la pandemia obligó al confinamiento domiciliario y al parón de las actividades no esenciales, los depósitos de los españoles se han incrementado en 89.700 millones de euros, un 9,2%.

A finales de julio, en su último informe “Situación España”, BBVA Research elevó un punto, hasta el 6,5%, su previsión de crecimiento de la economía española para este año, mientras que la mantuvo en el 7% la de 2022. Entre los motivos que le llevaron a realizar esta revisión al alza estaban el fin de las restricciones a la movilidad y el rápido avance de la vacunación que han acelerado el gasto de la bolsa de ahorro acumulada por los hogares y que BBVA cifra en 68.000 millones. “El consumo podría aumentar en promedio 1,5 puntos más en 2021 y 2022”, según la previsión del servicios de estudios del banco, que cree que ese dinero irá a servicios restringidos en la pandemia, hostelería y alojamientos, pero también a la compra de vivienda.

En otro estudio sobre el asuntos realizado por CaixaBank Research titulado «El papel del consumo embalsado en la recuperación de la eurozona en 2021», el servicio de estudios de esta entidad financiera argumenta en el mismo sentido que es probable que la demanda embalsada ayude a espolear la reactivación económica y, aunque posiblemente se deshaga de manera imperfecta, tendrá un impacto significativo sobre el conjunto de la actividad económica. De hecho, sus estimaciones sugieren que, «en el escenario optimista, el desencadenamiento del ahorro enjaulado podría añadir 2,5 puntos porcentuales al PIB de la eurozona en 2021 o, en el escenario más ponderado, algo más de 1 punto (en ambos casos respecto a un escenario en el que no se deshiciera nada de la demanda embalsada por la pandemia)». Pero, de momento, en julio, ese estirón del consumo no parece que haya llegado.

En cuanto a las empresas, sus depósitos también crecieron un 2,3% en comparación interanual, hasta alcanzar los 294.900 millones de euros. En cambio, cayeron cerca de un 2% respecto a los 300.800 millones del mes anterior. Esta diferencia se debe a que, a lo largo del año, los depósitos de las empresas han ido variando su tendencia, debido principalmente a las necesidades de liquidez derivadas de las restricciones a la actividad económica.