El maná europeo no termina de llegar ni a las comunidades autónomas ni a las empresas, entre las que siguen siendo las más perjudicadas la pymes. Así se pone de manifiesto en el global de las transferencias que dentro del Plan de Recuperación Transformación y Resiliencia se han realizado a las comunidades autónomas y que apenas alcanzan el 25% de lo comprometido en 2022 tras el primer semestre, máxime cuando se deberían de haber asignado ya al menos la mitad del total de los importes comprometidos.

«Las transferencias para convocatorias autonómicas llevan un ritmo más lento frente a las del Estado. Siguen existiendo retos importantes respecto de la coordinación con las comunidades autónomas, tanto en materia de avance y ejecución del Plan como en materia de reporte de datos», se advierte en el informe «Next Generation EU: claves, éxitos y dudas sobre su implementación», elaborado por la consultora LLYC.

Una de las razones que se aduce para este retraso tiene que ver con que algunos programas importantes de ejecución autonómica –como los de movilidad, autoconsumo o rehabilitación energética– que recibieron un adelanto sobre los fondos iniciales no están poniendo en marcha las ampliaciones, por lo que a medida que se van agotando la ejecución de las convocatorias autonómicas, se acumulan retrasos que pueden poner en peligro su ejecución y lanzamiento.

En cuanto a las convocatorias del Gobierno Central, el estudio señala que se han convocado casi el mismo importe en los cinco primeros meses de 2022 que en todo 2021. Sin embargo, las convocatorias activadas para este primer semestre del año 2022 apenas suponen el 50% que se debería haber puesto en marcha. LLYC también critica que los fondos sigue sin llegar en la medida que deberían al sector privado. Así, avisan de que la recepción y distribución del importante volumen de recursos que debería redirigirse hacia las pymes no está llegando como estaba previsto, además de que su concesión está resultando más problemática de lo esperado por la baja capacidad de gestión de las solicitudes de ayudas y de coinversión del cuadro empresarial español.

De las convocatorias y licitaciones previstas para el segundo semestre de 2022 ligadas al Plan de Recuperación, que alcanza una dotación de casi 11.000 millones de euros, todavía quedan pendientes más de 8.000 millones, mientras que el resto han sido traspasados ya desde el primer semestre de 2022.