Van Life: ¿es legal vivir en una furgoneta?

Viajar alrededor del mundo y descubrir nuevos lugares es un sueño que comparten la mayoría de personas. No obstante, ya sea por falta de dinero, un trabajo al que acudir presencialmente cada semana o una vivienda que mantener, pueden ser razones suficientes para dejar ese sueño aparcado, a excepción de aquellos que apuestan por tener una furgoneta como casa.

La Van Life o “vida en van” fue un término que se dio a conocer en el año 2012 cuando un diseñador de la firma Ralph Lauren de Nueva York dejó su casa y trabajo para irse a vivir a una furgoneta. Esta forma de vida ha ido cobrando popularidad en los últimos dos años, ya que cada vez más personas han decidido vivir de esta forma, convirtiéndose muchos de ellos en nómadas digitales.

Sin embargo, vivir sobre cuatro ruedas no es la primera elección para muchos, sino que la dificultad para acceder a una vivienda, sobre todo entre los jóvenes, por los elevados precios de los inmuebles ha impulsado esta nueva forma de vivir. Tanto es así, que seis de cada diez jóvenes entre 18 y 34 años han intentado emanciparse, pero el precio de la vivienda se lo ha impedido. Asimismo, dado que el teletrabajo cada vez está más expandido por el tejido empresarial, no hay nada que ate a una persona a un lugar concreto, pudiendo vivir en una furgoneta y disfrutar de la libertad de viajar por todo el globo sin tener que moverse de casa.

Por tanto, se puede afirmar que esta forma de vida, pese a que hay que pagar una serie de costes, es mucho más económica respecto a la vivienda tradicional; y además supone una ventaja para poder descubrir lugares desconocidos. No obstante, ¿es legal vivir en una furgoneta? Desde el portal inmobiliario de Fotocasa aseguran que sí, ya que no existe ninguna ley que prohíba hacerlo, aunque es necesario tener en cuenta ciertos aspectos si se decide adoptar esta forma de vida.

Por ley los ciudadanos deben tener un certificado de empadronamiento en el municipio en el que residen. Sin embargo, si se vive en una furgoneta no se tiene una residencia fija, por lo que desde 2015 el Gobierno de España permite empadronarse en un vehículo. Esto supone que la persona que adopte esta forma de vida no tendrá un domicilio fijo y según a la administración se estará habitando en una infravivienda.

En este contexto, los Servicios Sociales será quién se encarga de decidir si la furgoneta en cuestión es apta como vivienda, es decir, si puede tener la cédula de habitabilidad, ya que en caso contrario, no será posible empadronarse en este vehículo.

Sumado a esto, para que se pueda empadronar una persona en una furgoneta, es necesario que la vivienda sea fija o que esté al menos la mayor parte del tiempo en el mismo lugar. Es por ello que son muchos los que deciden comprar un terreno en el que se pueda estacionar este vehículo de una forma más o menos habitual.

Por último, al igual que sucede con el resto de vehículos, la furgoneta deberá pasar regularmente la ITV, disponer de un seguro y además estar estacionada siempre en lugares permitidos.