Inditex busca alternativas en Rusia sin descartar una venta

Más de siete meses después de suspender su actividad en Rusia, Inditexsigue sin tener claro qué hacer con su negocio en este país. La prensa rusa, concretamente «Kommersant», ha asegurado que el grupo textil español está prolongando contratos de alquiler de locales en centros comerciales al menos hasta el próximo mayo. Además, ha añadido que Inditex estudia «transferir activos locales a socios de un país amigo» del sudeste asiático o del golfo Pérsico, como vía para poder seguir operando allí con su marca insignia, Zara. Mientras, los negocios de Massimo Dutti, Oysho y Zara Home abandonarían por completo el mercado ruso, y el resto de marcas del grupo abrirían con otros nombres y con nuevas colecciones, siempre según el citado medio ruso.

Un escenario similar ha sido el empleado por el minorista polaco LPP, con marcas como Reserved, Cropp, Mohito y Sinsay. Esta compañía transfirió tiendas en la Federación Rusa a una empresa registrada en Emiratos Árabes Unidos. Al mismo tiempo, los puntos de venta del grupo de moda reanudaron su actividad, pero bajo nuevos rótulos.

Desde Inditex no obstante, aseguran que todas las opciones siguen abiertas. «Desde la suspensión de su actividad comercial en la Federación Rusa el pasado mes de marzo, Inditex está monitorizando la situación en el mercado con la prioridad de mantener el mayor nivel posible de puestos de trabajo. En este marco, Inditex analiza diferentes opciones y mantiene conversaciones exploratorias respecto a potenciales alternativas», ha declarado hoy mismo su consejero delegado, Óscar García Maceiras, en una visita a Zaragoza.

Provisión

Mientras toma una decisión, Inditex sigue pagando los alquileres de los locales de las tiendas, así como los salarios de sus empleados locales, que en el momento de la suspensión de actividades, eran más de 9.000 y 502 tiendas. Según la provisión que ha hecho la compañía para el conjunto de su ejercicio fiscal, que acaba a finales de enero, mantener esa suspensión de actividad en el que era su segundo mayor mercado le cuesta en torno a 20 millones de euros al mes. En total, la compañía ha provisionado 216 millones de euros para cubrir los gastos estimados hasta el fin de este ejercicio en Rusia y Ucrania.

El mercado ruso era, hasta la invasión de Ucrania, bastante relevante para la compañía gallega. Hasta entonces, generaba el 8,5% de su resultado de explotación. En concreto, el resultado antes de impuestos de este mercado fue de 86 millones de euros en 2020 (229 millones de euros en 2019), con unas ventas cercanas al 5% del total, lo que supone más de 1.000 millones de euros.