El Ibex-35, a la espera de acontecimientos

Sesión ligeramente alcista entre los principales selectivos mundiales que viven sin grandes movimientos el día previo a las elecciones de mitad de mandato en EEUU, y que tendrá el jueves un nuevo dato de inflación en la economía americana que determinará la tendencia de las próximas semanas.

El Ibex 35 no consigue alcanzar los 8.000 puntos, en parte por las caídas de unos de los pesos pesados del selectivo como es Telefónica que termina como el farolillo rojo de la sesión, tras la resaca de sus resultados del viernes. Liderando la sesión encontramos a Sacyr que ha presentado sus datos trimestrales, reportando un beneficio un 13% superior al año anterior. Otro de los ganadores del día es IAG que celebra los beneficios ofrecidos por Ryanair, con una expectativa de crecimiento constante en el sector, lo que también empuja al alza a Amadeus, y a Meliá. Sorpresa en las compañías acereras que terminan con alzas moderadas a pesar de conocerse durante el fin de semana que China se mantiene firme en mantener su política de Covid zero, lo que significa que la región es propensa a los bloqueos cuando se propaga el virus. El sector bancario, termina en su práctica totalidad en positivo destacando especialmente Caixabank, mientras que Santander sigue sin levantar cabeza tras comunicar sus resultados la semana pasada.

En materias primas, en general todas ellas viven con optimismo la sesión tras las caídas en el dólar. Particularmente destaca los precios del gas natural en EE. UU, que inician la sesión con una gran brecha de precios al alza debido a pronósticos de clima más frío, lo que implica subidas en su cotización de más del 11%, y preocupa la posible subida en su precio durante el invierno.

En divisas destacar una reciente declaración del gobierno, Jeremy Hunt, secretario del Tesoro del Reino Unido, señala que los ahorros y mayores ingresos fiscales darán como resultado un ajuste presupuestario de 54.000 millones de libras esterlinas. El mercado recibió esta información de manera muy positiva, convirtiendo a la libra en la moneda más fuerte del G10.

Manuel Pinto