Empresas

Y se compraron las «Matildes»

Arabia Saudí ha comprado casi el 10% de las antiguas «Matildes» por unos 2.100 millones de euros

Fachada de la sede de la multinacional española Telefónica, situada en la Ronda de la Comunicación, en el denominado Distrito Telefónica, a 22 de Julio de 2022, en el barrio de Las Tablas, Madrid, (España)Telefónica se ha convertido en el primer operador de telecomunicaciones del mundo en obtener la validación de sus objetivos medioambientales de cero emisiones netas por parte de la iniciativa Science Based Targets (SBTi). 22 JULIO 2022; Ricardo Rubio / Europa Press 22/07/2022
Fachada de la sede de la multinacional española TelefónicaRicardo RubioEuropa Press

Las acciones de la entonces Compañía Telefónica Nacional de España (CTNE) fueron en su momento en nuestro país uno de los máximos símbolos del capitalismo popular. Gracias a diferentes campañas publicitarias también eran conocidas como «las Matildes». Muchas familias invirtieron en estos títulos, cada una en la medida de sus posibilidades. Estoy seguro de que bastantes personas con unos cuantos años a sus espaldas tienen todavía acciones antiguas, que han conservado como oro en paño y, si son más jóvenes, puede que las hayan heredado de sus padres y abuelos. Y estoy seguro también de que puede que, con cierta nostalgia, se hayan acordado de todo lo relatado anteriormente, al conocer la noticia de que los de Arabia Saudí se han comprado casi el 10% de las antiguas «Matildes» por unos 2.100 millones.

Más allá de los factores financieros, bursátiles, económicos y estratégicos de la operación puesta en marcha por los compradores, no hay que desdeñar el componente sicológico y sentimental de la misma. Puesto de manifiesto lo anterior, ahora tocará analizar como los compradores han logrado hacerse, poco a poco y a la chita callando, con ese casi 10% hasta convertirse en los mayores accionistas de una empresa que es ciertamente estratégica, no solo para España, sino también en el conjunto de la UE. Después, habrá que esperar a lo que dice el Gobierno en funciones, porque Telefónicay su sector tienen un marcado carácter estratégico, que afecta a las telecomunicaciones o a la defensa y, por supuesto, a la generación de contenidos para los medios de comunicación. Ninguno de esos factores es desdeñable. Y, por último, sin ánimo de hacer exhaustiva la relación de elementos que confluyen en esta operación, habrá que ponerse a cavilar si las empresas claves para España están caras o baratas en estos momentos en la Bolsa. Es verdad que 2.100 millones es una cifra significativa, pero también es cierto que para los de Arabía Saudí se trata del «chocolate del loro» y con eso se han podido comprar casi el 10% de nuestras, para algunos, «queridas Matildes». ¿Es necesario tomar alguna medida al respecto para evitar que se produzcan situaciones como la anterior, o no? Estamos ante otro asunto objeto de debate y con el Gobierno en funciones.