El éxito exportador reduce casi a cero el déficit comercial

A falta de consumo interno, el sector exterior se ha convertido en la tabla de salvación para muchas compañías españolas, que están haciendo de la necesidad virtud y aprovechando la mejora de la competitividad que se ha conseguido en los últimos años con la caída de los salarios y los ajustes de plantillas, están vendiendo fuera lo que no les compran en casa. Mes a mes, las exportaciones crecen y en mayo, España prácticamente equilibró su balanza comercial, en buena parte gracias a ellas. Las ventas en el exterior sumaron 20.890,8 millones de euros, un 7,3% más que en el mismo mes de 2012 y un 2,4% más que en abril. Eso, sumado al retroceso del 2,2% de las importaciones –20.918,2 millones de euros– dejó el déficit comercial en mayo en apenas 27,5 millones de euros, con una tasa de cobertura del 99,9%, según los datos difundidos ayer por la Secretaría de Estado de Comercio. Se trata de la segunda vez en la historia desde que existe esta estadística en que España equilibra sus exportaciones e importaciones. La anterior ocasión fue en marzo.

Mejor que antes de la crisis

Un dato refleja la pujanza del sector exterior español: los casi 21.000 millones en ventas foráneas que consiguieron las empresas fuera son muy superiores a los 16.668 que se registraron en 2007, el último año previo a la crisis.

En lo que va de ejercicio, las exportaciones españolas de bienes han crecido un 7,4%, hasta los 97.873,7 millones de euros, mientras que las importaciones se han reducido un 3,2%, hasta los 103.591 millones, dejando el déficit comercial en 5.717,7 millones de euros, un 64,1 por ciento inferior al que hubo entre enero y mayo de 2012.

Aunque España sigue dependiendo fuertemente del resto de Europa para sus ventas exteriores, en los últimos años está logrando diversificar el destino de las mismas. Las exportaciones a mercados extracomunitarios representaron en los primeros cinco meses del año el 38,2% del total, con un aumento del 16,3%, gracias a la mejora de las ventas a África (+20,4%) o Asia (+20,4%). En China crecieron un 17,1%, en Estados Unidos un 10,9% y en Brasil un 43,6%. El dato cobra especial relevancia en un momento en que la economía europea sigue sin despegar y para España se antoja fundamental buscar nuevos mercados en los que colocar los productos que no pueda vender a sus socios de la Unión para así mantener la velocidad de crucero adquirida en los últimos meses. En los cinco primeros del año, el superávit comercial con la UE alcanzó los 8.352 millones de euros. Con la eurozona el superávit fue de 5.100,5 millones de euros.

Los bienes de equipo fueron el principal sector exportador y, tras crecer un 5,3%, representaron el 19,4% del total, seguidos de los alimentos –15,2%– y el automóvil –14,6%–. Subsectores de alto contenido tecnológico como maquinaria para industria –10,1%–, aeronaves –29,7%– y de electrodomésticos –36,2%– registraron notables avances en sus ventas durante el mes de mayo.