España sale de su recesión más larga

La economía española salió en el tercer trimestre del año de la recesión técnica tras crecer un 0,1% entre julio y septiembre, según las estimaciones del Banco de España.

La economía española ha dejado de estar técnicamente en recesión en el tercer trimestre. Según adelantó ayer el Banco de España en su último Boletín Económico, el Producto Interior Bruto creció entre julio y septiembre un 0,1% en relación con el periodo anterior, después de nueve trimestres consecutivos en negativo, concretamente desde el segundo trimestre de 2011. Mariano Rajoy, desde Barcelona, aseguró que España ha iniciado su recuperación económica «de modo lento y gradual». En términos interanuales, la mejoría no se ha trasladado aún a las cifras, que indican una contracción del 1,2 por ciento.

El dato del Banco de España tendrá que ser confirmado por el Instituto Nacional de Estadística (INE) el próximo día 30 en su avance de la contabilidad nacional. La demanda exterior ha sido la principal protagonista del cambio de tendencia al aportar al PIB cuatro décimas de crecimiento que han podido compensar el retroceso de la demanda interna, un 0,3%, un porcentaje similar al del segundo trimestre.

El consumo de los hogares

El instituto monetario que gobierna Luis Linde vislumbra «un pequeño avance del consumo de los hogares», que justifica por la moderación del ritmo de descenso del empleo y la notable desaceleración de la inflación a lo largo del verano (0,3% en tasa anual). Ambas circunstancias contribuyeron a la mejora relativa de capacidad de compra de los hogares en términos reales. El diferencial de inflación con la eurozona ha pasado a ser negativo (seis décimas), un hecho inusual.

En materia de empleo, el Banco de España habla de una leve reducción intertrimestral del 0,1%, cifra que, si finalmente se confirma, representaría la tasa menos desfavorable desde el inicio de la crisis. En verano se ha mantenido el proceso de contención de los salarios, que se ha visto acompañado de una cierta desaceleración del comportamiento de la productividad (2% en términos interanuales). La conjunción de ambos factores ha permitido una reducción de los costes laborales por unidad de producto.

La inversión de la tendencia en la economía española se produce en un panorama internacional caracterizado por «una cierta desaceleración del ritmo de crecimiento», como consecuencia de una menor actividad en las economías emergentes.

Ésta será la segunda salida de la recesión que experimenta la economía española desde que se inició la crisis. Nuestro país registró su primera caída del PIB en el tercer trimestre de 2008, de acuerdo con los datos actualizados del Instituto Nacional de Estadística. Entonces, el PIB se redujo un 0,6%, cuando venía de crecer a tasas intertrimestrales del 0,7% apenas un año antes. Después de seis meses de recesión continuada, con caídas del PIB de hasta el 1,7% (primer trimestre de 2009), se abría la luz en marzo de 2010, cuando se retornaba a tasas positivas. La gravedad de los problemas estructurales de nuestra economía hizo que la alegría duraba apenas cinco trimestres.

Capacidad de financiación

El informe trimestral de la economía española confirma un trimestre más que la inversión empresarial está recuperándose de manera incipiente.

A lo largo de los meses de verano se ha intensificado la recuperación de los ingresos por turismo, lo que ha contribuido a que la economía acumule en los siete primeros meses del año una capacidad de financiación de 4.500 millones de euros, frente a un déficit de 13.700 millones del mismo periodo del año anterior. En los últimos doce meses, el superávit exterior ascendió a 13.000 millones de euros, alrededor del 1,3% del PIB.