Grecia
Grecia promete recortar más de 4.000 millones entre el escepticismo de la UE
Tsipras insiste en la necesidad de reestructurar la deuda y Bruselas tacha de «vagas» las medidas de ajuste helenas
Tsipras insiste en la necesidad de reestructurar la deuda y Bruselas tacha de «vagas» las medidas de ajuste helenas
El discurso de Alexis Tsipras evoluciona tan poco como los trabajos en Bruselas. El primer ministro griego lanzó de nuevo un desafío a los socios europeos y volvió a insistir en la necesidad de reestructurar la deuda. «Si Grecia se queda sin dinero, se atenderá la situación humanitaria y el pago de salarios y pensiones antes que la deuda», proclamó Tsipras en la apertura de la sesión extraordinaria celebrada ayer para dar explicaciones sobre el curso de las negociaciones. El pleno tuvo como telón de fondo la presentación de la lista detallada de reformas, con la que el Gobierno heleno espera recaudar más de 4.000 millones.
«Con el acuerdo del 20 de febrero se reconoce que se abre la discusión sobre la reestructuración de la deuda», apuntó el premier griego. Además, Tsipras defendió que no existe diplomacia secreta y atacó al anterior Gobierno conservador por cerrar el año pasado con un reducido 0,3% de superávit primario, así como por su incapacidad para combatir la corrupción y la evasión fiscal.
El primer ministro heleno también consideró que la estrategia de Atenas «ha dado sus frutos», mientras que Bruselas lamentaba la falta de concreción en el listado de reformas del Gobierno griego, que ha obligado a alargar las discusiones técnicas más allá del fin de semana y ha generado el escepticismo entre los socios europeos. Los trabajos técnicos entre Grecia y el Grupo de Bruselas continúan a un ritmo muy lento ante la vaguedad de las medidas formuladas por Gobierno griego. Las instituciones pidieron a Grecia que detallara el paquete de reformas, dado que son «demasiado vagas» como para cerrar la lista definitiva, que debía entregarse ayer.
La primera muestra de desconfianza ante el Gobierno heleno sobre el avance de los trabajos técnicos llegó por parte de la canciller alemana, Angela Merkel, quien ayer advirtió a Grecia de que más vale que el programa de reformas satisfaga a los socios europeos, aunque pueda contar con cierta flexibilidad a la hora de aplicarse. «La pregunta es si Grecia puede o podrá satisfacer las expectativas que hemos depositado en ella», declaró la canciller en Helsinki. «Entendemos que las medidas por las que opte [Atenas] puedan estar sujetas a variaciones, pero a la hora de cumplir con el marco general, más vale que estén a la altura», zanjó Merkel, que se mostró cautelosa a la espera de la evaluación técnica del Grupo de Bruselas, como ya hiciera en su encuentro con Tsipras.
Todo lo contrario del optimismo que emanó Atenas. El ministro adjunto de Finanzas heleno, Dimitris Mardas, aseguró que las discusiones se producen en un clima de cooperación, aunque la parte helena se ha negado a aplicar recortes masivos. «Esa cuestión ya no se discute, tampoco hay desacuerdos en cuanto a las pensiones y el IVA», dijo Mardas en una entrevista ayer en la cadena MegaTV. Además, el ministro adjunto de Finanzas señaló que no habrá una subida generalizada del IVA, «aunque esa sigue siendo una de las cuatro medidas todavía abiertas». También rechazó la posibilidad de aumentar el IVA en alimentos, hoteles y medicamentos. Los otros motivos de desacuerdo, según medios locales, pueden ser la reforma laboral, el ajuste de las pensiones y la eliminación de impuestos a las rentas más bajas.
La lista de reformas es «cuantitativa y permitirá cosechar 5.000 millones de euros», apuntó Mardas, una previsión por encima de las previsiones filtradas por el Ministerio. Los cálculos gubernamentales parten de un superávit primario de entre el 1,2% y el 1,5% del PIB en 2015 y de un crecimiento económico del 1,4%.
Lista incompleta
Sin embargo, según oficiales de la eurozona, la lista presentada el viernes era una «colección de ideas» carente de detalles técnicos. El vicepresidente de la Comisión Europea, Valdis Dombrovskis, reconoció que se ha perdido mucho tiempo discutiendo los puntos técnicos y que se necesitan hacer progresos.
Varias fuentes de la capital belga coinciden en que las negociaciones se han centrado en «algunas propuestas» que no bastan para recibir el visto bueno de los acreedores, pero no sobre una lista detallada. Con ese ritmo, se descarta la celebración de un Eurogrupo esta semana para aprobar una lista todavía lejos de concretarse. Por entonces, Grecia tendrá que cubrir alrededor de 1.400 millones de euros en refinanciación de los bonos griegos a seis meses, que vencen el 14 de abril, mientras que el 9 de abril está fechada la devolución de 450 millones por un préstamo del FMI.
Los ahorros que propone Tsipras
- Privatización del Pireo
Este paquete también incluye 14 aeropuertos regionales y será vendido este mismo año.
1.500 millones
- Dinero negro en el extranjero
El Gobierno griego pretende captar los depósitos de capital heleno fuera del país.
725 millones
- Fraude en el IVA
Es otra de las grandes partidas de las reformas del Gobierno, la lucha contra la evasión fiscal.
350 millones
- Cambio de tipos en el IRPF
El Ejecutivo de Alexis Tsipras pretende aumentar la tributación sobre las rentas.
270 millones
- Licencias de TV privada
Syriza también ha propuesto a Bruselas la venta de derechos de emisión a las televisiones.
600 millones
- Contrabando de gasolinas
El Ejecutivo pretende hacer aflorar capitales no declarados por contrabando de hidrocarburos.
250 millones
- Venta de tabaco en negro
De forma similar a la prevista en las gasolinas, pretende captar liquidez con el tabaco «negro».
225 millones
- Recaudación tributaria
Tsipras también propone recuperar hasta 225 millones con cambios en la recaudación.
225 millones
- Apuestas electrónicas
El Ejecutivo heleno también ampliará el número de licencias para apuestas.
200 millones
✕
Accede a tu cuenta para comentar