Crisis bancaria

La banca recortará otros 12.869 empleos este año

Los grupos nacionalizados acapararán más de la mitad de los despidos y prejubilaciones. Las entidades cerrarán 4.300 oficinas e indemnizarán con más de 20 días por año trabajado

La Razón
La RazónLa Razón

La reestructuración bancaria española, que obligó al Gobierno a pedir a Europa ayuda por valor de 40.000 millones de euros, destruirá este año otros 12.869 empleos en el sector financiero. A la espera de conocer el plan de ajuste de Catalunya Banc, que será acometido por el futuro comprador de la entidad, la cifra de puestos de trabajo destruidos en banca desde que comenzó la crisis económica (2008) se eleva ya hasta los 43.479, según los datos recopilados por el Banco de España.

Los bancos nacionalizados –Bankia, NCG Banco y Banco de Valencia, esta última en manos de Caixabank– copan más de la mitad de los despidos y prejubilaciones, 7.145 entre las tres. La entidad que preside José Ignacio Goirigolzarri es la que más puestos de trabajo destruirá, un total de 4.500 empleos. Le siguen NCG Banco (Novagalicia), con 1.850 despidos, y Caixabank y Banca Cívica, que suprimirán 3.002 puestos. Banco CEISS (la antigua Caja España-Duero), por su parte, suprimirá 1.500 empleos.

Reforma laboral

Ninguna de las entidades que hasta la fecha han anunciado despidos masivos en sus plantillas se ha ceñido a los mínimos establecidos tras la reforma laboral. Tanto los acuerdos alcanzados con los sindicatos como las ofertas de la dirección de los bancos a las centrales contemplan indemnizaciones superiores al mínimo de veinte días por año trabajado que recoge la norma y que aplican con diligencia, por ejemplo, los propios sindicatos.

Santander y Banesto, que hasta la fecha han eludido facilitar el volumen total de despidos en sus plantillas –se prevé que ronden los 2.500 empleos por el número de oficinas cerradas–, son las entidades que más indemnización prevén abonar a sus ex empleados. En concreto, ofrecen bajas incentivadas de 45 días por año trabajado a los trabajadores que abandonarán sus plantillas. Unnim (BBVA), por su parte, recoge indemnizaciones extraordinarias con 50 días por año trabajado a los ex empleados de entre 50 y 52 años de edad.

Las entidades que peor indemnizan a sus ex empleados son Novagalicia Banco y Caja 3, con despidos de 25 días por año trabajado y bajas incentivadas con un máximo de 30 días, mientras que la media de las indemnizaciones del sector bancario en 2013 ronda los 30 días por año en caso de extinciones forzosas y los 35 días para las salidas pactadas y/o voluntarias.

Respecto a las prejubilaciones, las retribuciones van desde el 60 por ciento del salario de los últimos cinco años que prevé abonar Bankia hasta el 85 por ciento que pagará Banco de Valencia a sus ex empleados de más de 63 años. Estas medidas afectarán a unos 3.400 empleados del sector financiero nacional, a la espera de conocer los planes de Banco CEISS, Santander-Banesto, Catalunya Caixa y Caja 3 para sus empleados de mayor edad.

Lo que no parece que variará mucho es el número de sucursales bancarias que prevé suprimir el sector, cerca de 4.000. Bankia eliminará aproximadamente el 39 por ciento de su red comercial, unas 1.100 oficinas, mientras que entre Caixabank y Banca Cívica cerrarán aproximadamente 1.000. Santander y Banesto, por su parte, eliminarán cerca de 700 oficinas y Banco de Valencia verá cómo desaparece el 90 por ciento de su red de sucursales.

Desde los máximos alcanzados a finales de 2009, cuando España llegó a tener 52.468 sucursales bancarias, el número no ha parado de descender. A finales de 2012, el sector bancario tenía 48.335 oficinas, una cifra que descenderá hasta el entorno de las 44.500 al cierre del presente ejercicio. En total, la crisis bancaria habrá supuesto el cierre de unas 8.000 sucursales de bancos y cajas de ahorros en nuestro país. El retroceso del volumen de negocio del sector, así como la oleada de fusiones acometidas durante la crisis han obligado a las entidades a echar el cierre de muchas de sus oficinas no sólo para ahorrar costes sino también para evitar duplicidades en lugares donde antes había dos bancos distintos.

Las entidades sortean las nuevas trabas a la jubilación anticipada

A partir de hoy, las empresas que lleven a cabo ERE tendrán más difícil incluir jubilaciones anticipadas y parciales debido a la entrada en vigor de la nueva regulación que endurece el acceso a estas dos figuras para tratar de incentivar la prolongación de la vida laboral. Las entidades financieras no son una excepción y, de hecho, algunas de ellas se han visto atrapadas en mitad de las negociaciones por la entrada en vigor de la normativa. Barclays, por ejemplo, ha planteado un expediente colectivo que en un principio afectará a 1.100 trabajadores y cuyo primer periodo de consultas concluyó el lunes sin acuerdo entre el banco británico y los sindicatos.

Dado que la normativa no afecta a los expedientes aprobados o suscritos antes del 1 de abril, algunos bancos como Caixabank se han apresurado a cerrar acuerdos en las últimas semanas. La entidad catalana alcanzó un acuerdo con los sindicatos en la madrugada del 26 de marzo para reducir su plantilla. En virtud del mismo, no habrá ningún despido forzoso y las salidas voluntarias, que se articularán a través de un ERE, tendrán un tope de 2.600 personas. El plan se desarrollará en dos años, hasta 2014.

Desde hoy, la edad necesaria para la jubilación anticipada forzosa se fija en cuatro años antes de la edad legal, de tal forma que la edad de acceso será en 2013 de 61 años y un mes, y subirá gradualmente año tras año hasta alcanzar los 63 años en 2027. El periodo mínimo de cotización exigido para acceder a esta jubilación pasará de 30 a 33 años y para poder acogerse a esta modalidad se exigirá ser demandante de empleo al menos seis meses antes de la solicitud. Los coeficientes reductores que se aplicarán sobre la pensión serán de entre el 6%, con 44,5 años cotizados, y el 7,5%, con 38,5 años cotizados. En lo que respecta a la jubilación anticipada voluntaria, se eleva a 35 años el periodo mínimo de cotización exigido. Además, la edad para acceder a la jubilación anticipada voluntaria se establece en dos años antes de la edad legal, es decir, 63 años y un mes para 2013, que irá incrementándose de manera progresiva hasta alcanzar los 65 años en 2027.