Los extranjeros suben su inversión en deuda en julio, mientras los particulares huyen de la baja rentabilidad

Los extranjeros elevaron su inversión en deuda española en el mes de julio un 1,8% respecto y sumaron 320.887 millones de euros, con lo que se mantiene en niveles máximos, mientras que los pequeños inversores redujeron sus tenencias huyendo de las bajas rentabilidades que está ofreciendo el Tesoro. En concreto y según datos del Tesoro, la inversión extranjera en deuda aumentó en 5.733 millones en el séptimo mes y supone ya el 45,04% del total invertido. Los foráneos recuperaron el ritmo inversor en agosto de 2012, cuando volvieron a acudir a los mercados y retomaron el puesto de principal inversor en deuda que les había arrebatado la banca nacional.

La reducción de la incertidumbre que proporcionó el anuncio del Banco Central Europeo (BCE) sobre su mecanismo OMT de compra de deuda en el mercado secundario estaba detrás de esa recuperación de la confianza en España, que cogió fuerza en los meses posteriores.

A lo largo de 2013, los extranjeros fueron poco a poco elevando sus inversiones, salvo algunos 'parones' concretos, como el registrado en el mes de marzo coincidiendo con la merma de confianza que supuso el rescate de Chipre.

Exceptuando algún descenso más en los meses de verano, los inversores foráneos fueron invirtiendo cada vez en deuda, con aumentos de incluso más de 20.000 millones en algunos meses, como en noviembre.

Mientras que los extranjeros perciben a España como un valor seguro tras el estancamiento de la zona euro en el segundo trimestre, los pequeños inversores, en cambio, están reduciendo sus compras de deuda por las bajas rentabilidades que está ofreciendo el Tesoro.

De hecho, las personas físicas redujeron en 154 millones sus tenencias de deuda en julio y cuentan ahora con 4.2142 millones de euros, el 0,60% del total. Esta situación se puede repetir en agosto, un mes en el que interés del bono a diez años llegó a tocar mínimos próximos al 2% y los tipos de las letras a tres meses llegaron a tocar tipos negativos en el mercado secundario.

Por su parte, la banca española, que sostuvo las inversiones del Tesoro los meses en que los extranjeros dejaron de comprar, también ha reducido sus inversiones en 2.151 millones de euros.

De hecho, cuenta ahora con 202.412 millones en deuda española, el 28,41% del total, después de haber reducido su exposición en 8.302 millones a lo largo del año pasado.

Tras la banca se sitúan las administraciones públicas, que han reducido sus compras en julio en 8.099 millones y cuentan ahora con el 7,69% del total. Por detrás se sitúan las entidades de seguros, con el 6,98% del total (49.703 millones); los fondos de inversión, con el 5,67% (40.424 millones) y las empresas no financieras con el 2,44% (17.417 millones).

Los que menos deuda acumulan son los fondos de pensiones, con el 2,39% (17.037 millones); otras instituciones financieras, con el 0,77% (5.495 millones) y las personas físicas, con el 0,60% (4.242 millones).