Nueva amenaza de huelga de trabajadores de Iberia en El Prat

El comité de huelga amplía el periodo de negociación. Los trabajadores señalan a la dirección por la falta de propuestas para llegar a un acuerdo que evite la paralización de El Prat

El tráfico de pasajeros en el Aeropuerto de El Prat en Barcelona vuelve a estar en jaque. Los trabajadores de tierra de Iberia continuarán con los paros en agosto, como los que se llevaron a cabo los días 27 y 28 de julio y que provocaron la cancelación de más de un centenar de vuelos. Aunque amplían el plazo para que la compañía dé salida a las peticiones, los empleados no cesarán en la huelga hasta que se les concedan turnos de trabajo que permitan la concilación de la vida laboral y familiar y que no abusen de la prolongación de jornada.

El comité de huelga de Iberia no concreta el plazo de este nuevo ultimátum, después de que, en un principio, amenazaran con haber registrado la convocatoria el pasado viernes. Según ha informado UGT, sindicato mayoritario entre los trabajadores de Iberia en Barcelona, el esfuerzo de los empleados contrasta con la posición de la dirección de la empresa y con su falta de propuestas alternativas viables “que consigan evitar la paralización del aeropuerto de El Prat en el mes de agosto”.

El comité pone de manifiesto la “necesidad de buscar soluciones de carácter inmediato” y no cree que sea positivo dilatar el proceso. Por ello las fuentes sindicales han señalado que “se da un plazo breve para encontrar una solución y se reserva la posibilidad de convocar nuevos paros durante el mes de agosto”. A este respecto, sostienen que se ha cumplido el compromiso alcanzado por los trabajadores con la Consejería de Trabajo de la Generalitat en busca de alternativas, llevando la negociación hasta el final para evitar nuevas jornadas de huelga.

El aeropuerto catalán tiene otro frente abierto. La huelga indefinida de vigilantes convocada por el comité de empresa de Trablisa, encargada de los controles de seguridad del aeropuerto de Barcelona. La nueva convocatoria se producirá este viernes 9 de agosto. Para paliar los efectos, la Delegación del Gobierno en Cataluña ha decretado servicios mínimos del 90%. La resolución ha sido justificada por el organismo al considerar que el llamamiento afecta a una de las “infraestructuras críticas”, la del transporte público, sometida a medidas especiales de seguridad, prevención y control por parte de los cuerpos de seguridad que cuentan con la colaboración de los vigilantes.

A la huelga están llamados cerca de 500 trabajadores que dejarán su puestos en los controles de acceso durante la temporada de verano, una de las etapas de mayor demanda del año, pudiendo ocasionar graves retrasos. El miércoles, representantes de los trabajadores y la dirección de la empresa se reunirán, con la mediación del Ministerio de Trabajo, para tratar de desencallar el conflicto.