Agricultura
El presidente en España y Portugal de Corteva, la única agrícola cotizada del mundo: "La agricultura es un sector con oportunidades. Hay que comer todos los días"
Manuel Melgarejo asegura que Europa debe construir "una red que nos permita garantizar la soberanía alimentaria"
Manuel Melgarejo habla de la empresa que dirige en España y Portugal, Corteva Agriscience; y del sector al que se dedica, el agrícola, desde "la vocación, la formación y la dedicación". Ingeniero agrónomo de formación, lleva al frente de esta compañía en la Península desde que se creó hace ahora seis años tras un "spin off" de la fusión entre Dow y DuPont.
La empresa cotizada 100% agrícola más grande del mundo, Corteva tiene su sede ibérica en Sevilla junto a un potente centro de investigación, el más importante del mundo de girasol. Melgarejo asegura que él se cree su razón de ser, que resume en ayudar al agricultor. A que "las prácticas agrícolas que usen sean sostenibles, a la vez que rentables. Ayudarles a que se ajusten a las nuevas legislaciones y a las nuevas demandas de la sociedad".
Aunque reconoce que el reto no es menor y que enfrenta muchos obstáculos como la falta de mano de obra. Que no equivale, aclara, a falta de talento. Porque en España, asegura, "hay mucho talento a nivel de agrónomos y agricultura. Y hay mucho conocimiento", destaca. Distinta, abunda, es la realidad de la escasez de gente que se dedica al campo, que tiene que ver con factores como la legislación, la falta de rentabilidad o la situación de la España vaciada.
"En España hay mucho talento a nivel agrónomo y de agricultura y mucho conocimiento"
También está el hecho, como reconoce Melgarejo, de que cada vez más gente quiere vivir en la ciudad. Un círculo que, dice, hay que romper aunque sea complicado. Y eso que, como dice con una afirmación tan rotunda como evidente, en la agricultura "hay oportunidades porque es un sector primario y hay que comer todos los días. Y eso va a seguir siendo así".
La población activa agraria se ha reducido de tal forma que, según Melgarejo, ha pasado de representar el 14% o el 15% del total de la europea en los años 60 o 70 del siglo pasado a representar ahora apenas el 4% o el 5%.
Esta escasez no sólo de mano de obra sino de recursos como por ejemplo el agua en España es la que obliga según Melgarejo a "hacer más con menos". Y más, teniendo en cuenta que la población a alimentar va a seguir creciendo. "Es que vamos a ser 10.000, 10.500 u 11.000 habitantes dentro de 25 años. Mucha gente que quiere comer", advierte.
Para conseguir esa optimización de recursos, Corteva dispone de cuatro plataformas: semillas, protección de cultivos, productos de origen biológico y agricultura digital.
Esta última palanca es la que, de alguna forma, tiene que hacer según Melgarejo que todo el engranaje funcione si se quieren lograr cultivos rentables y más productivos. La agricultura digital evoluciona de la de precisión, que, según el directivo, es la que permite el aumento de productividad. "Te permite, a través de datos de satélite, dron o sensores en el suelo, el manejo específico de tu parcela". "Haces lo mismo con menos, porque lo que están haciendo es lo que te está demandando cada parte de tu explotación o cada parte de tu cultivo de forma muy dirigida a esas necesidades concretas", resume.
Hablando de avances tecnológicos y mejoras de producción, Melgarejo recuerda que la Comisión, el Consejo y el Parlamento Europeo están ahora mismo debatiendo sobre una cuestión que considera crucial y que permitiría un salto cualitativo y cuantitativo muy importante en este aspecto, la edición genética.
Como explica, estas técnicas permitirían hacer mapas genómicos de las especies para dotarlas de unas determinadas características o incrementar su rendimiento. "Nosotros estamos trabajando en variedades de maíz que consuman menos agua, que aguanten el estrés hídrico..." Variedades, dice, que en el caso por ejemplo de España, que sufre episodios periódicos de sequías, serían muy útiles. "Y dices, ¿es ciencia ficción? No, se puede hacer. Se puede optimizar la planta de manera que te produzca lo mismo con un porcentaje X menos de agua, o menos nutrientes. Más por menos", resume Melgarejo, que asegura que, de hacerse, tendría un coste proporcionado a la ciencia que conlleva pero que permitiría que esos cultivos sean rentables.
En Europa también se ha hablado en los últimos tiempos de seguridad, de garantizar el suministro energético. Pero Melgarejo cree que también es importante el debate que se ha abierto sobre la seguridad alimentaria. "La seguridad alimentaria es fundamental. Tenemos que construir una red, no sé si de stocks, de acuerdos, de producción interna... que nos permita mantener la soberanía alimentaria de Europa. Y tenemos capacidades para hacerlo", concluye.