Un empresario alemán puja por Air Berlin

Hans Rudolf Wöhrl, que compró Deustche BA a British en 2003, planta cara a Lufthansa.

A pocos días para que finalice el plazo, un nuevo interesado se une a la puja por hacerse con el control de la insolvente Air Berlin. Se trata de inversor alemán Hans Rudolf Wöhrl. Todo un conocido dentro del sector aeronáutico germano y que está dispuesto a poner 50 millones de euros encima de la mesa como garantía de un pago inicial por su oferta. No sería la primera vez que este empresario sale al rescate de una compañía aérea de bandera alemana. En 2003, compró Deutsche BA a British Airways, aunque entonces desembolsó la simbólica cantidad de un euro.

Esta vez quiere apostar más fuerte. Según el comunicado que acompañó a la oferta, Wöhrl no solo quiere que Air Berlin siga siendo alemana, sino que le augura un futuro fuerte en el que «al menos el número actual de empleados será necesario». Toda una esperanza para los trabajadores de esta empresa que desde hace semanas miran con incertidumbre el futuro de sus puestos de trabajo. Además, el inversor –a través de su empresa su empresa Intro Group–, informó a las aerolíneas Lufthansa, Condor y Germania así como la compañía de turismo TUI y el inversor Niki Lauda sobre la oportunidad de «participar» en su oferta. Air Berlin, la segunda aerolínea más grande de Alemania, pidió en agosto la protección por bancarrota, despertando el interés de varios compradores que buscan quedarse con unos 140 aviones y valiosas terminales en aeropuertos alemanes. Además de la de Wöhrl, hay otras ofertas.

La primera en mostrar su interés fue Lufthansa aunque según los expertos, su objetivo (por motivos de competencia) pasa por quedarse con 70 de los 144 aviones que tiene Air Berlin. La británica Easyjet y la germana Condor, del grupo turístico internacional Thomas Cook, también revelaron su intención por participar activamente en el rescate.

Unas ofertas a las que se suma la del empresario berlinés Alexander Skora, junto a un gran consorcio de inversores de Israel, Canadá y Estados Unidos; la de la estrella de la Fórmula 1, Niki Lauda, o la de Zeitfracht, una empresa de logística que mostró su interés por adquirir la totalidad de la aerolínea. La decisión se conocerá previsiblemente el próximo 21 de septiembre. Hasta entonces, y mientras busca un inversor, Air Berlin podría adelantar la fecha límite para la cancelación de sus rutas de largo radio para intentar recortar costes antes de quedarse sin efectivo.