La "bomba Sánchez" no altera las catalanas

Los partidos nacionalistas podrían reeditar un problemático gobierno de la Generalitat gracias a que Junts mejora algo sus expectativas electorales para el próximo 12 de mayo y, por supuesto, contando con que las CUP no hagan alguna de las suyas. Al menos, así se desprende del sondeo que ha hecho «NC Report» para LA RAZÓN, que no refleja grandes cambios con respecto a encuestas anteriores, pese a que el trabajo de campo se llevó a cabo cuando ya se conocía la decisión del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de tomarse cinco días para reflexionar sobre su continuidad al frente del Ejecutivo.

En efecto, tanto ERC como Junts y las CUP mejorarían sus resultados con respecto a las últimas generales de julio de 2023, –en las que el nacionalismo rozó su nadir frente a los abrumadores resultados del PSC y el mejor desempeño del Partido Popular–, algo normal por el marco autonómico de la convocatoria. Ahora bien, sí podemos hablar del «efecto Sánchez» en el caso de ERC, porque el partido de Oriol Junqueras y de Pere Aragonés, que se vio obligado a adelantar las elecciones, se deja en la encuesta un 4 por ciento de los votos que obtuvo en 2021 y caería hasta los 27 escaños, viéndose superada por la formación de Carles Puigdemont, que obtendría 33 diputados, uno más que en los anteriores comicios.

Queda por delante mucha campaña, con los ecos de lo que suceda en Madrid, pero parece que la buena sintonía de los republicanos con La Moncloa, tras la concesión de los indultos a los condenados por el procés, tal y como la perciben sus votantes, va a pasarles factura. Como primera providencia, la encuesta nos dice que el partido de Junqueras y Aragonés es el que registra los peores índices de fidelidad, con sólo un 58,8 por ciento de encuestados que aseguran que van a repetir su voto, frente al 80,3 de Junts o el 87 del PP.

El mayor beneficiario de esas «deserciones» será Puigdemont, que recibirá el apoyo del 11 por ciento de los antiguos votantes de ERC, es decir, casi 80.000 votos, pero también se beneficia el PSC, al que apoyarían 70.000 ex republicanos, que sumados a los que pierden los Comunes en favor del candidato socialista y algunos restos de Ciudadanos, dan a Salvador Illa la victoria, con hasta 39 escaños, pero insuficientes para gobernar con los Comunes.

Siempre queda una opción, un bloque no nacionalista que sume desde Ada Colau a Vox –que representarían el 50,4 de los sufragios–, pero estaríamos ante uno de esos imposibles políticos como el que ha llevado a Pedro Sánchez a La Moncloa, pese a perder las elecciones generales por 14 escaños frente al PP. A este respecto, la encuesta señala la franca recuperación de los populares en Cataluña, que podrían llegar hasta los 14 diputados en la Asamblea–tenía solo 3– pese a que la formación de Santiago Abascal se mantiene en los 11 escaños que obtuvo en 2021.