El PSOE dará libertad a los barones para alcanzar acuerdos postelectorales

El actual mapa de fragmentación política hace que los partidos encaren los próximos comicios municipales y autonómicos recurriendo a la aritmética para formar gobierno. En esta tesitura, el PSOE es consciente de que, en virtud de la realidad actual, no puede imponer una estrategia unitaria para toda España, sino que cada feudo tendrá –atendiendo a sus circunstancias estructurales– libertad para establecer su propia política de alianzas. Así lo expresó ayer el secretario general de los socialistas, Pedro Sánchez, en un encuentro informal con periodistas previo a su intervención en un mitin en Fuenlabrada junto al candidato a la Comunidad, Ángel Gabilondo, y el candidato a la alcaldía de Fuenlabrada, Manuel Robles.

Estos acuerdos puntuales en función el territorio tendrán, en todo caso, que ser avalados por la dirección federal, aunque ya no será Ferraz, como se señaló en un primer momento, quien fije la política de pactos a aplicar en cada federación. Cuando Susana Díaz advirtió de que no admitiría «injerencias» de Madrid en las negociaciones para garantizar su investidura, el secretario de Organización, César Luena, le recordó que, con los Estatutos del partido en la mano, la última palabra en materia de pactos le correspondía al Comité Federal.

A pesar de gozar de cierta autonomía, los barones reiteran en público y en privado que no gobernarán «a cualquier precio» y que no pagarán peajes por conseguir la investidura. Además, en este baile de parejas hay dos formaciones con las que el PSOE no se abre a pactos: el Partido Popular y Bildu, salvando las distancias entre ambas formaciones.

«No pactaremos ni con populares ni con populistas». Así de tajante se ha mostrado el PSOE cuando se le preguntaba por pactos postelectorales, un discurso que el líder del partido, Pedro Sánchez, suavizó considerablemente el pasado sábado. En una entrevista en La Sexta, el secretario general socialista reconoció que su formación es «ahora mismo el único partido» que «puede pactar con Podemos, con Ciudadanos y con IU» porque está «en la centralidad». Un espacio y una realidad política, la actual, que no permite cerrarse opciones de diálogo.

Coincidirá con Díaz en campaña

Andalucía será el territorio en el que más presencia desplegará el secretario general del PSOE en su campaña de apoyo a candidatos para las elecciones municipales y autonómicas. En su periplo, visitará todas las provincias menos Córdoba y Almería, y compartirá al menos un acto con la presidenta de la Junta, Susana Díaz, que esta semana volverá a someter a votación su investidura. Fuentes de Ferraz todavía no confirman la fecha, el lugar o la tipología del acto –encuentro sectorial o mitin– en el que coincidirán las cabezas visibles del socialismo actual.

El secretario general del PSOE y Díaz no se ven desde el Comité Federal que se celebró en la sede nacional el pasado 28 de marzo, tras una campaña, la andaluza, en la que Sánchez tuvo un discreto protagonismo. La relación de ambos líderes no pasa por su mejor momento, a pesar de que han preferido mantener sus diferencias al margen de la campaña autonómica y municipal.

La última vez que ambos hablaron fue hace dos días, a raíz el accidente mortal de un avión militar en Sevilla, en el que fallecieron cuatro trabajadores de la compañía Airbus.