El coronel Pérez De los Cobos recurre su cese ante el Ministerio del Interior

“Las razones no eran reales y, además, eran ilegales”. Ésta es la idea fuerza del recurso de alzada que el coronel de la Guardia Civil Diego Pérez de los Cobos ha presentado ante el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, en contra de la decisión de cesarle adoptada por el secretario de Estado de dicho departamento, Rafael Pérez.

Según fuentes próximas al coronel, el recurso (el ministro tiene hasta tres meses para resolver) está basado en gran parte en el escrito que la directora general de la Guardia Civil dirigió al citado secretario de Estado en el que venía a confirmar que los motivos del cese no eran los de una mera perdida de confianza o una remodelación de la cúpula de la Benemérita, aducidos por Marlaska en el Parlamento, sino “por no informar del desarrollo de investigaciones y actuaciones de la Guardia Civil, en el marco operativo y de la Policía Judicial con fines de conocimiento”. El documento está firmado por la propia María Gámez.

Es decir, se confirmaba que a de los Cobos se le había pedido algo expresamente ilegal, como que revelara el contenido de unas diligencias judiciales sobre las que, además, la instructora, la jueza Rodrígez Medel, había pedido la máxima confidencialidad.

Una vez conocido este escrito, desde el Ministerio del Interior se adujo que lo que realmente se le había pedido a Pérez de los Cobos es que informara sobre quién o quienes habían filtrado la noticia de la existencia de un informe que la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de Madrid, que él mandaba, había entregado a la citada jueza sobre la posible incidencia de las manifestaciones del 8M en la expansión de la pandemia del coronavirus.

Según fuentes próximas al coronel, será el ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska, el que resuelva el recurso sobre la decisión que adoptó su secretario de Estado, Rafael Pérez. En caso de que no se le diera la razón, el mando de la Guardia Civil acudiría a la legislación contencioso administrativa.

Diego Pérez de los Cobos, desde que se produjo su cese, ha trabajado minuciosamente en la preparación del recurso que, al menos esta tarde, no quería dar a conocer en su literalidad. Para el militar, aunque se haya convertido en un asunto mediático, es algo absolutamente profesional y con el recurso pretende que quede claro que su cese no se produjo por no cumplir con sus obligaciones, sino justamente por lo contrario.

Si en el Ministerio del Interior molestó la filtración de la noticia de que existía un informe (no su contenido), que, curiosamente, fue filtrado profusamente a los medios de comunicación después del cese de de los Cobos, no parecía motivo suficiente para tomar una decisión tan drástica como la del cese.

Está en marcha una investigación, en la que están siendo auditados (no clonados) los ordenadores de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid desde los que podría haber salido la filtración del documento. Hasta el momento, se desconoce el resultado de estas pesquisas internas, pero parece poco probable que, de haber sido desde la Comandancia, alguien hubiera utilizado el ordenador que tiene asignado para facilitar el citado informe a terceros.

En un primer momento, Grande-Marlaska atribuyó el cese a razones de organización internas y lo desvinculó de ese informe, si bien posteriormente matizó que respondía a la filtración del mismo a los medios y argumentó que no daba más detalles por respeto a la carrera profesional De los Cobos. Dejó la sombra de la duda y no resolvió nada. Lo cierto es que entre explicación y explicación se conoció un escrito de la directora general de la Guardia Civil al secretario de Estado en el que se daba cuenta de que el cese se había dado por su negativa a dar unos datos que, por otra parte, de los Cobos no poseía.

Todo un enredo que concluyó con la dimisión del Director de Apoyo Operativo (DAO), Laurentino Ceña, al entender que se habían vulnerado los derechos del coronel (al que no se le dio la oportunidad de defenderse) y por los perjuicios que causaba a la carrera profesional del mando, con una hoja de servicios impecable, noticia adelantada también por LA RAZÓN.

Cuando la jueza Rodríguez Medel decidió archivar todo lo relativo a la posible imputación del delegado del Gobierno en Madrid por la autorización de las manifestaciones del 8M, son muchos los que se han preguntado en qué ha quedado todo el revuelo montado, que ha puesto en tela de juicio una brillante carrera profesional como la del coronel Pérez de los Cobos; y si las decisiones no deberían haber sido más meditadas antes de ser adoptadas de una manera, al menos en apariencia, tan atropellada.

El siguiente capítulo de todo este asunto es la reprobación parlamentaria por parte de la oposición contra Grande Marlaska, que se debate esta semana en el Congreso.