Javier Gómez Fidalgo, uno de los abogados fiscalistas del novio de Isabel Díaz Ayuso, ha negado en su declaración de este martes como investigado que pueda ser "cooperador necesario" en el fraude fiscal por el que se investiga al empresario.

El letrado leonés acusa a la Fiscalía de haberse equivocado al señalarle a él como el que presentó las autoliquidaciones del impuesto de Sociedades de 2020 y 2021 de una de las empresas de Alberto González Amador -Masterman & Whitake-, tal y como ha podido saber LA RAZÓN de fuentes jurídicas. En la causa, la jueza Inmaculada Sanz indaga en si pudo haber una defraudación de 350.000 euros en este tributo.

Gómez Fidalgo ha explicado ante la titular del Juzgado de Instrucción número 19 de Madrid que el novio de la presidenta madrileña le contrató en mayo de 2022, a posteriori y cuando la inspección de la Agencia Tributaria ya estaba en marcha.

Por otro lado, en cuanto a las presuntas irregularidades en que sea el casero de Gónzalez Amador en un ático en el centro Madrid, situado justo encima del piso que comparte con Ayuso, el abogado ha defendido, ya fuera del juzgado, que se trata de un "negocio como otro cualquiera" y que está sujeto a la legalidad.

La pareja de la baronesa del PP, explicó, en su declaración como parte de la pieza separada en torno a sus negocios con Quirón, que mantiene alquilado, con opción de compra, el inmueble a su asesor fiscal y, por ello, paga todos los meses una renta de 5.000 euros.

La instructora no ha permitido a las acusaciones populares -PSOE y Más Madrid- preguntar por este extremo al estar fuera del objeto del procedimiento que se limita a dos delitos fiscales y uno de falsedad en documento mercantil.

La declaración celebrada este martes, y que ha durado casi dos horas, estaba fijada en un inicio para el pasado 6 de mayo pero la jueza Sanz la pospuso para hoy a petición del investigado, que alegó que no le habían dado traslado del contenido de la causa.