Casado ofrece a Sánchez sus senadores para aplicar el 155 si Torra persiste en la provocación

Rivera urge a Moncloa a enviar un requerimiento a la Generalitat para que acate la legalidad.

El llamamiento del presidente de la Generalitat, Quim Torra, para «atacar» el Estado español, la actitud desafiante del Gobierno catalán hacia los Reyes durante los actos celebrados con motivo del aniversario del 17-A y la hoja de ruta con la que el independentismo pretende movilizar a sus bases de cara a un «otoño caliente» en lo político y en lo judicial, suponen unas amenazas inaceptables ante las que el Ejecutivo de Pedro Sánchez debe actuar ya. En estos términos se expresaron ayer los máximos dirigentes del Partido Popular y Ciudadanos. Tanto Pablo Casado como Albert Rivera consideran que el presidente del Gobierno debe mover ficha frente a los desafíos de Torra. Tienen claro que si el pulso al Estado se intensifica aprovechando la Diada, el aniversario del 1-O o el inicio del juicio por el «procés», habrá llegado la hora de volver a activar el artículo 155 de la Constitución.

Lo que el presidente del PP exigió ayer a Sánchez es que detalle la estrategia jurídica que su Gobierno va a poner en marcha para poner coto a las palabras y hechos con los que Torra amenaza al Estado. Si Moncloa no pone freno a estos hechos, precisan fuentes populares, Casado solicitará iniciar el procedimiento legal para aplicar el 155 en Cataluña. Un planteamiento que el presidente de los populares ya trasladó a Sánchez durante la reunión que ambos líderes mantuvieron en La Moncloa el pasado 2 de agosto. Si llegara el caso de que fuera necesaria la intervención del Gobierno central en Cataluña, Casado reiteró ayer su disposición a ofrecer la mayoría absoluta que los populares tienen en la Cámara Alta, necesaria además para poner en marcha el 155: «O el Gobierno de España pone freno a estas cuestiones, o el PP solicitará la activación del 155 y, además, pudiendo ofrecer los votos en el Senado suficientes para que entre en vigor».

A juicio de Casado, las declaraciones de Torra en las que instó a «atacar al Estado español» constituyen un paso más en la escalada dialéctica de los partidos y entidades secesionistas y la contemporización con la que reaccionó el Ejecutivo de Sánchez –la vicepresidenta Carmen Calvo aseguró el domingo que la afirmación del presidente catalán no representa ni una amenaza ni un ataque– no frenará el desafío: «Si algo tenemos que reconocer a los independentistas es que lo han venido amenazando en las últimas fechas, luego lo llevan a cabo». Y respecto al hecho de que Calvo restara importancia a las declaraciones de Torra, el líder de los populares recordó que «los peores momentos de confrontación que vive la historia empiezan por frases». En todo caso, Casado recordó que es el Gobierno el que tiene que hacer frente a las amenazas de la Generalitat y puso como ejemplos el escrache sufrido por el juez Pablo Llarena y la denuncia interpuesta por Carles Puigdemont contra él en Bélgica –ante la que, recordó, que «el Gobierno ni siquiera ha aclarado si la Abogacía del Estado va a apoyar»– así como las «agresiones» contra las personas que retiran lazos amarillos en Cataluña.

Desde Ciudadanos, su presidente, Albert Rivera, considera que ha llegado el momento de que el Gobierno de Sánchez envíe un requerimiento a la Generalitat para que Torra explique formalmente a qué se refirió cuando habló de «atacar» al Estado. El líder de la formación naranja concede la máxima gravedad a esas palabras: «Hay que tomárselas en serio y tomar medidas. Es evidente que hay que requerir a Torra que acate la legalidad». El requerimiento al que se refirió Rivera constituye el paso previo a la activación del 155 por parte del Gobierno para su posterior aprobación en el Senado. En el caso de la aplicación del 155 el pasado mes de octubre, el por entonces presidente Mariano Rajoy lo remitió al presidente Puigdemont para que éste aclarase si había declarado o no la independencia de Cataluña. Si ahora Sánchez enviase ese requerimiento, la activación del 155 dependería de la respuesta de Torra.

En el contexto actual, Rivera considera que el presidente catalán dice la verdad cuando habla de «atacar» a España: «Agradezco a Torra la sinceridad porque creo que es evidente que quieren atacar al Estado, lo que pediría a Sánchez es que no se equivoque de aliados porque los adversarios políticos son los nacionalistas».

Para Ciudadanos, que en su día se mostró en contra de que se dejase de aplicar el 155 y de que se devolvieran las competencias a la Generalitat, la activación de este mecanismo político previsto en la Constitución podría ponerse en marcha en esta ocasión para actuar sobre algunas competencias en concreto como, por ejemplo, la política exterior o en torno a la gestión de la policía autonómica catalana.