Caso Pujol

Jordi Pujol Ferrusola seguirá en prisión por el riesgo de que oculte pruebas

De la Mata ha detectado operaciones para "hacer inaccesibles los bienes"o para "obstaculizar el acceso a evidencias"

Jordi Pujol Ferrusola, en una de sus comparecencias ante el juez en la Audiencia Nacional
Jordi Pujol Ferrusola, en una de sus comparecencias ante el juez en la Audiencia Nacionallarazon

Jordi Pujol Ferrusola continuará en prisión provisional hasta, al menos, que se pronuncie la Sala Penal sobre su petición de libertad, después de que ayer el juez de la Audiencia Nacional José de la Mata hubiese rechazado el recurso presentado en ese sentido.

Jordi Pujol Ferrusola continuará en prisión provisional hasta, al menos, que se pronuncie la Sala Penal sobre su petición de libertad, después de que el juez de la Audiencia Nacional José de la Mata hubiese rechazado el recurso presentado en ese sentido. Con carácter subsidiario, la defensa solicitaba la imposición una medida alternativa y menos gravosas, petición a la que se opuso la Fiscalía Anticorrupción.

El magistrado que investiga todo lo relacionado con la fortuna de la familia del ex presidente de la Generalitat señala en su auto que a lo largo de la causa se han multiplicado «los elementos para considerar que el investigado «ha venido realizando un progresivo proceso de ocultación de información y evidencias y de descapitalización de todos los activos patrimoniales y financieros que se le podían atribuir»; y, de forma especial, alude a que si quedara en libertad existiría el riesgo de que continuase con la actividad delictiva o que ocultara pruebas de la misma.

De la Mata indica que en este momento persisten los motivos por los que se acordó la prisión incondicional como son la existencia de patrones de comportamiento, pautas de actuación, instrumentos y herramientas empleados para generar, ocultar y blanquear activos y los elementos organizacionales subjetivos, objetivos y de la acción empleados por Jordi Puol Ferrusola para manejar toda su estructura económica.

En cuanto a los riesgos de obstrucción de pruebas, el magistrado destaca que en el caso de «Junior» no sólo se ha actualizado este peligro en actividades concretas y específicas de ocultación de pruebas, «sino que se ha mostrado una alta capacidad de interlocución en distintas jurisdicciones y con diferentes personas para continuar moldeando, reconstruyendo y acondicionando las distintas operaciones efectuadas a lo largo del tiempo, con el objetivo, por un lado, de hacer inaccesibles los bienes y, por otro, para impedir o al menos obstaculizar el acceso a las evidencias».

Además, el juez deja claro que los hechos por los que se investiga Jordi Pujol Ferrusola no se circunscriben a delitos de blanqueo de capitales, como señalaba la defensa en su recurso, sino que también se subsumen en posibles delitos contra la Hacienda Pública, delitos de falsedad en documento mercantil y, como se viene apuntando en reiteradas resoluciones, de organización criminal, sin perjuicio de ulterior calificación, puntualiza el magistrado.

El juez vuelve a enumerar las circunstancias que motivaron el auto de prisión el pasado 25 de abril, comenzando por la estrategia desarrollada a lo largo de los años por Pujol Ferrusola y consistente en la puesta en marcha de una estructura societaria meramente instrumental, «sin existencia ni actividad productiva real cuyo objeto ha sido canalizar capitales de presunto origen criminal».Estas sociedades, añade el magistrado, facturaron más de 11 millones de euros supuestamente por tareas de asesoramiento, consultoría e intermediación, pero «en ninguno de los casos se ha aportado el más leve indicio que justifique la realidad de tales trabajos».