Guindos deja claro que él no filtró la información

El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, no dudó en reconocer ayer que las investigaciones que se están llevando a cabo contra el ex vicepresidente económico Rodrigo Rato por posibles delitos de blanqueo de capitales, alzamiento de bienes y fraude no son un «caso sencillo», pero quiso dejar claro al respecto que «la ley está por encima de otras cuestiones». Lo dijo en una entrevista en Onda Cero, en la que el ministro explicó que son los propios funcionarios de la Agencia Tributaria los que han puesto en manos de la Fiscalía el caso, para agregar que «así es como se trabaja en los países avanzados».

De Guindos también aprovechó para mostrar su apoyo al ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, y consideró que este caso «salta cuando tiene que saltar». «Hubiera sido absolutamente inaceptable haber encubierto las actuaciones», aseguró el titular de Economía, quien aclaró que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, «estaba informado cuando efectivamente tenía» que estarlo.

El ministro subrayó, además, que él no sabe cuál es el patrimonio de Rato ni el contenido de la investigación que lleva a cabo la Agencia Tributaria: «No sé absolutamente nada y no es mi misión saberlo», aseguró tajante. Además, apuntó que «el tema no es el conocimiento, es la interferencia». «Aquí no ha habido ninguna interferencia, en absoluto», aseguró.

Preguntado por si le molesta que algunos medios afirmen que fue él quien filtró la investigación fiscal sobre el ex vicepresidente, aseguró que no iba a «andar en frivolidades ni en cuestiones conspiratorias», pero dejó caer que antes de que la información se filtrara a la prensa, Hacienda ya había remitido el expediente a la Fiscalía Anticorrupción. «Está ahí, es un dato», subrayó.

En este sentido, Guindos indicó que lo importante no es saber cuándo se enteró exactamente el ministro de Economía de la investigación a Rato, sino que el tema fundamental es que las instituciones «han funcionado», como lo hicieron en el tema de Bankia o en el de las «tarjetas black» de la entidad financiera.