PAULINO RIVERO: «Los intereses políticos hacen un flaco favor a la cohesión del Estado»

–Hay que compensar a las CC AA que han cumplido escrupulosamente sus compromisos en esta materia, como Canarias, con la fijación de un déficit individualizado. Lo contrario –premiar el incumplimiento– sería una injusticia y un agravio a los ciudadanos de aquellos territorios que han tenido que soportar las cargas de un ajuste en las cuentas públicas que, lógicamente, afecta a los servicios que reciben.

¿Cómo? El Estado debería tener en cuenta aspectos como la tasa de paro, el nivel de endeudamiento y el grado de cumplimiento en los objetivos de los déficit anteriores.

–Si los límites se establecen en función de intereses exclusivamente políticos haríamos un flaco favor a la cohesión social y territorial del Estado. El primer objetivo es intentar llegar a un acuerdo para establecer un déficit individualizado y compensatorio a las comunidades autónomas cumplidoras. Sólo en el caso de que no se pudiera alcanzar un consenso con respecto a este punto el déficit debería ser exactamente igual para todos.

–Hubo comunidades autónomas que comenzaron a hacer su tarea antes que otras. En Canarias comenzamos a tomar medidas desde finales del año 2007, lo que nos ha permitido afrontar –no sin dificultades– los compromisos que se nos exigían en materia económico-financiera. Hemos actuado con una enorme responsabilidad y lealtad institucional.

–Todas las CC AA tenemos tareas pendientes, es verdad que unas más que otras. Nosotros hemos cumplido y queremos ahora disponer de un mayor margen para afrontar políticas orientadas al crecimiento y la generación de empleo. Las medidas centradas exclusivamente en la austeridad deben dar paso a otras de estímulo económico.

–Lo que está claro es que el modelo territorial de España debe ser puesto al día, adaptándolo a un tiempo que no es el mismo que cuando se diseñó. Con lealtad institucional y con respeto al marco normativo, se deben promover cambios en la Constitución para buscar un mejor encaje no sólo de Cataluña, sino de otras comunidades como Canarias que precisan ver reconocido al máximo nivel su hecho diferencial, como ya ocurre en los tratados europeos.

–Tal y como se acordó en la última Conferencia de Presidentes, hay que modificar el sistema, especialmente lesivo para comunidades como Canarias. Hoy por hoy es un sistema perverso que alimenta las desigualdades entre los ciudadanos de los distintos territorios, porque ese dinero se destina a sufragar la Educación, la Sanidad y las políticas sociales. Canarias, por ejemplo, recibe 384 euros menos por habitante que la media del Estado, algo que resulta incomprensible. ¿Por qué esa diferencia? No queremos más que nadie, pero menos tampoco.