Negociaciones

El plan del PSOE: amnistía antes de la investidura

Los socialistas aseguran que tendrán el «sí» de Junts en primera votación y descartan una foto final entre Sánchez y Puigdemont para escenificar el acuerdo

Los diputados y senadores van tomando asiento en el Congreso de los Diputados
Los diputados y senadores van tomando asiento en el Congreso de los DiputadosJavier Gallego

Todo está casi cerrado y en el PSOE empiezan a descontar las horas, a la vez que a trabajar a destajo. Además, el plan de los socialistas se está cumpliendo y también los tiempos, una vez cerrado el acuerdo de coalición con Sumar, el resto de pactos se encuentran cerca de rubricar. La investidura es cuestión de días y esa convicción llega porque el acuerdo con los independentistas está prácticamente desbloqueado y la ley de amnistía a falta de detalles finales. Ahora, el embrollo de las negociaciones entre los socialistas y los independentistas se encuentra en el cómo y cuándo. Quién debe registrar la proposición de Ley de Amnistía –si PSOE o los socios– y cuándo –antes o después de la investidura–.

En el PSOE ya barajan registrar en el Congreso la proposición de Ley de Amnistía en los próximos días y dejan entrever que no les importaría ser ellos quienes la registren, con la firma de Sumar, ERC y Junts. Fuente socialistas inciden en que «hay 56 parlamentarios que apoyan la amnistía y que ellos están de acuerdo en apoyarla». Será en el momento en el que PSOE e independentistas escenifiquen el acuerdo cuando se anuncie si se presenta antes o después la ley, pero en Ferraz reconocen que la intención es registrarla antes de la investidura. Sería justo después de que Sánchez reciba el apoyo de la Cámara cuando el Congreso podrá debatir y aprobar la citada ley si el Congreso de los Diputados tramita y convoca de manera inminente el pleno, algo que es totalmente viable debido a la mayoría de izquierdas en la mesa de la Cámara.

Si bien evitan aclarar la fecha concreta de la investidura, estas fuentes explican que, a partir del domingo «cualquier día es bueno». El domingo es cuando el PSOE cerrará su consulta a su militancia sobre el pacto de Gobierno con Sumar y para que avalen las alianzas necesarias para superar la investidura. En el PSOE explican que aunque la consulta se dilata hasta finales de semana no impide que la fecha señalada se anuncie en esta semana. Este viernes, la presidenta del Congreso reúne a la mesa del Congreso y a la Junta de Portavoces y es más que probable que de esa reunión salga la fecha de investidura, según fuentes parlamentarias. La fecha que se maneja en el Congreso de los Diputados es la del martes siete de noviembre como debate de investidura y, un día después, el ocho, la primera votación, a falta de confirmación oficial. En el PSOE lo que si rechazan es que la investidura se dilate hasta el último momento, es decir no conseguir la confianza de la Cámara en primera votación no está en los planes socialistas. En Ferraz aseguran que contarán con el «sí» de Junts en la primera votación para que Sánchez sea elegido con mayoría absoluta.

Así, en Ferraz y en el Congreso trabajan con la idea de que pueden recibir de manera inmediata la proposición de ley de amnistía. A finales de esta semana o el próximo lunes, según preven.

Los socialistas reconocen que se encuentran a las puertas de cerrar los acuerdos y aunque hay prudencia en los detalles, este mismo lunes dieron publicidad al avance de las negociaciones al publicar la fotografía del encuentro entre el número tres del PSOE, Santos Cerdán, con el expresident fugado, Carles Puigdemont. Una foto que avivó las esperanzas en el PSOE para confiar en la investidura y que, a pesar de que en público, el Ejecutivo evitó pronunciarse ayer sobre las conversaciones con los independentistas. Fuentes socialistas explican que en esa reunión se habló de la propia fecha de investidura, del acuerdo para la amnistía pero también de los futuros pactos durante la legislatura.

El objetivo de los socialistas es no solo negociar una investidura sino garantizar la continuidad de los apoyos de sus socios para mantener una legislatura estable durante cuatro años. Se resta importancia a la polémica de la foto dentro de la foto. Es decir, al cuadro que presidía la reunión entre la delegación socialista y la de Junts en Bruselas, un retrato de la manifestación del referéndum independentista con una urna. Fuentes socialistas aseguran que no les molestó ésta Y que el marco con el que los socialistas trabajan es con el de los «reencuentros». «Se trata de que la reconciliación la hagamos entre todos», abundan

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Otra de las incógnitas es cómo escenificarán los socialistas los acuerdos con Junts. El presidente del Gobierno si tuvo un gesto con Esquerra al llamar por teléfono a su líder, Oriol Junqueras. Sin embargo según la hoja de ruta socialista no está previsto que Pedro Sánchez llame a Carles Puigdemont o se fotografíe con él. Según explican en la cúpula del partido, el expresidente no ha puesto como línea roja un símbolo al más alto nivel para cerrar la negociación.